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Noticias Nacionales

5 tips de psicología y nutrición

todaydiciembre 24, 2025

Fondo



Las fiestas de Navidad y Año Nuevo se
suelen vivir como una prueba por aquellas personas que están preocupadas por
controlar su peso. Muchas veces, lejos de disfrutarlas, cada una de las comidas
de esos días se transforma en un cuestionamiento constante. ¿Estará bien si
como esto? ¡No debería!

Y a ese pensamiento repetitivo de quienes se
esfuerzan por no sumar kilos, muchas veces se suman los comentarios e
invitaciones de familiares, amigos y otros asistentes a las comilonas de fin de
año. “¿Un poquito más?”; “no te va a hacer nada”; “no exageres, no estás tan
gorda/o”. Un cocktail explosivo.

Entonces, pasa que la persona come y luego
sobreviene la culpa. O no come y también la culpa, pero por no aceptarle la
torta a la tía, el budín a mamá o las mollejas al abuelo. Y después, si la
balanza llega a mostrar que los permitidos se tradujeron en kilos, más culpa
aún.

¿Cómo controlar (sin sufrir) las
comidas de Navidad y Año Nuevo?

“La Navidad no tiene por qué sentirse como una
prueba. Podés disfrutar, escuchar tu cuerpo y conectar con lo que realmente
importa. La comida no es el problema: la culpa sí”. Así lo plantea la
psicóloga Deborah Cardozo, directora de la clínica Psiconutriendo, y da
“5 tips para una Navidad sin culpa”.

El primero de los consejos es: “mantené tus
rutinas diarias
”. “Esta es una de las recomendaciones que vienen más del
lado de la nutrición y que propone que en el día de la Navidad y Año Nuevo
mantengamos los tiempos de las comidas normales. Hacer el desayuno como
habitualmente lo hacemos, el almuerzo… O sea, que sea un día más y la
excepción sea únicamente la cena”, explicó. 

Lo que suele suceder es que las personas se
desordenan desde el inicio del 24 de diciembre o del 31, entonces cuando llega
la noche y se plantea la cena especial, “se sienten abrumados”, dijo la
especialista. “La idea es no exigirnos donde no podemos y eso es, generalmente,
en la cena familiar, que es excepcional. Entonces, lo que proponemos es
mantener el orden donde sí se puede”, agregó.

Elegir y disfrutar los permitidos
de Navidad y Año Nuevo

Hay dos de los tips que van de la mano:
“Elegir tus bocados favoritos” y “disfrutar de cada bocado”. La idea aquí es
que la persona defina qué es lo que va a comer y lo pueda saborear, realmente,
sin culpas. “Si son ocho bocados, por ejemplo, disfrutarlos, porque tenías
ganas de comerlos y tenías apetito. Y tomar en cuenta que, si decidiste darte
ese permitido, es para pasarla bien. ¿Para qué lo vas a vivir con culpa? La
culpa solo genera malestar, no ayuda a cambiar nada”, acotó.

Sin embargo, Cardozo apuntó a algo que suele
suceder en las fiestas: “Cuando uno empieza a descontrolarse y a comer de más,
hasta se pierde el sabor de la comida”. “Cuando uno come hasta reventar tampoco
lo disfruta e incluso después termina sintiéndose mal. La clave es ir
escuchando al cuerpo”, dijo.

Parar de comer antes de estar
lleno

Prestar atención a lo que el organismo nos va
diciendo va de la mano con el tip 4: “parar cuando estás satisfecho” y con el
5: “respirar y conectar”. La cultura y las costumbres nos presentan a las
fiestas tradicionales como un momento obligado de comidas copiosas, que no se
detienen hasta que el cinturón empieza a incomodar. Pero lo cierto es que, como
lo marca la medicina y la nutrición, lo sano es parar bastante antes.

En ese sentido, uno de los consejos que dan
desde Psiconutriendo es darse tiempos entre comidas, porque la señal de que uno
está lleno no llega instantáneamente al cerebro. “Aguanto 15 minutos, veo cómo
me siento y ahí, o a los 20 minutos, el cerebro me dice que ya está”, acotó
Cardozo.

Dar ese tiempo, ayuda a elegir más con
conciencia y “comer con conciencia también ayuda a que lo disfrutes”. Por
supuesto, dijo la psicóloga, no se trata de “obsesionarse”. “No implica estar
pensando todo el tiempo en la comida, porque la idea es que la persona viva un
lindo momento, ya sea que esté rodeado de gente o solo; que pueda conectar con
el presente y vivirlo con alegría”, señaló.

Atracones: ¿Y el día después?

Cuando pasa que la persona no logra
controlarse y se da el atracón, termina pensando en que mañana
empieza la dieta
. De hecho, muchas veces esos “permisos” de comer tanto
llegan porque la dieta del día después aparece como salvadora. Pero no es así.

“Compensar no es la solución. Al otro día hay
que volver a la rutina, como si no hubiera pasado nada la noche anterior. No
ayuda pensar ‘me levanto y hago un detox y no como nada en todo el día’, porque
justamente ahí es donde aparece la culpa, que solo nos genera más conflicto”,
expresó la psicóloga.

“Lo más importante es que somos lo que hacemos
todos los días; lo que hacemos la mayor parte del tiempo y no lo que hacemos
excepcionalmente. Entonces, no preocuparnos tanto por la Navidad o Fin de Año,
sino por buscar hábitos saludables a lo largo de la vida”, recalcó.

¿Cómo influye el consumo alcohol?

Tanto Cardozo como el equipo de nutricionistas
que trabajan junto a ella recomiendan que no se tomen bebidas alcohólicas.
“Como centro de salud, desde Psiconutriendo, no lo recomendamos. Claro que
sabemos que está y obviamente que la gente lo toma, pero no aporta
nutricionalmente al organismo”, apuntó.

“El aporte que hace, quizá, es más desde esa
idea de compartir. Entonces, si se va a consumir, que sea desde un lugar
precavido, desde la elección y para disfrutar del sabor y no para desinhibirse
o dejar de estar en conciencia. Que sea solo para el momento del brindis, por
ejemplo”, indicó.





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Escrito por hiperactivafm


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