Por Joaquín Symonds
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El viernes 26 de setiembre, la Justicia logró la prisión preventiva por 90 días para el joven de 18 años, quien atropelló a una niña de cinco en Nuevo París (Montevideo). El hecho se dio en el marco de una serie de maniobras imprudentes que iba haciendo el motociclista, precisamente, la conocida como “willy”.
Ante esto, la fiscal de Flagrancia de 12° Turno, Mirna Busich, solicitó y logró la imputación de por un delito de lesiones gravísimas a título de dolo eventual, de acuerdo con la información que en su momento dio el departamento de Comunicación del Ministerio Público.
En la audiencia, también se formalizó una investigación en contra de otro joven de 21 años que acompañaba –en motos diferentes– al de 18. En el caso del acompañante, se le imputó un delito de omisión de asistencia y otro de encubrimiento en reiteración real.
En el caso del hombre de 18 años, de apellido Montero, su defensa apeló la decisión de la Justicia y pidió que fuera trasladado a prisión domiciliaria con colocación de tobillera. Los argumentos manejados por los abogados fueron que se trató de un accidente de tránsito y no de un delito doloso, es decir, tener la intención de lastimar a la víctima de cinco años.
“Nos puede pasar a cualquiera de nosotros”, indicaron los defensores, además de entender que su cliente es primario absoluto por lo que no hay argumentos jurídicos para dictar la cautelar con prisión preventiva.
A los dos involucrados los describieron como “chiquilines de familias trabajadores, humildes y vulnerables”. Los abogados recalcaron que las familias mostraron voluntad de colaborar con la víctima e incluso plantearon la idea de explorar un acuerdo reparatorio con la familia de la víctima.
Sin embargo, un Tribunal de Apelaciones descartó las razones brindadas por los abogados y ratificó la prisión preventiva para el conductor, quien deberá seguir detrás de las rejas por 90 días, según la sentencia a la que accedió Montevideo Portal.
En tanto, la fiscal Busich sostuvo que no se trató de un simple accidente de tránsito, sino que de “un delito a título de dolo eventual”. “Es una niña la víctima, indefensa, se le arruinó la vida. Si se salva se le arruinó la vida”, añadió el Ministerio Público.
Sobre el hecho en sí, además, relataron que el conductor Montero “embistió a la niña, la arrastró varios metros y cayó en una cuneta”.
En tanto, el Tribunal de Apelaciones relató que el siniestro se dio luego de una “actividad ilícita guiada por el llamado dolo egoísta”. “No es como dice la defensa que es algo que nos puede pasar a cualquiera de nosotros, pues no cualquiera anda conduciendo motos haciendo maniobras como las desarrolladas por los imputados”, indicó el organismo.
La niña, además de seguir en CTI en estado grave y sufrir una intervención cerebral, se le extrajo el bazo.
Por Joaquín Symonds
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