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Una situación que encendió las redes sociales se dio con el
segundo gol a favor de Miramar en el encuentro ante Peñarol de la undécima
fecha del Clausura pitado vía VAR.
Una pelota quieta desde la zona central fue enviada por uno
de los jugadores locales rumbo al área carbonera, al borde del área grande por
la banda izquierda, donde se generó la acción que después tuvo consecuencias.
Pablo López, que fue un problema para los aurinegros por ese
sector, saltó para cabecear la pelota hacia el medio, Pedro Milans en su
intento desesperado no pudo llegar a la pelota pero además se elevó con los
brazos en alto, el balón dio en uno de ellos y se fue al córner.
Gracias a una actuación verdaderamente consagratoria, Matías Arezo rescató a @OficialCAP del naufragio ante @miramaroficial, con el que empató 2 a 2 en Durazno. Así, el aurinegro se mantiene en la punta del Clausura, aunque parece despedirse de la Anual. Este es nuestro compacto. pic.twitter.com/hLQalsjvWg
— Tenfieldoficial (@tenfieldoficial) October 11, 2025
Hernán Heras en primera instancia desestimó ante la protesta
de los dirigidos por Bernardo Giordano, pero fue el VAR que entró en acción
para revisar lo sucedido.
Antonio García y Santiago Fernández revisaron la jugada,
detectaron la mano, consideraron que fue dentro del área y convocaron a Hernán Heras a revisar la jugada en el monitor.
El árbitro fue, observó, se dio vuelta y pitó el punto penal ante la protesta
de Maximiliano Olivera.
Sebastián da Silva se encargó de ejecutar con precisión la
pena máxima desairando a Cortés y colocando el 2-0 parcial, ante la molestia de
los carboneros por lo sucedido.
En el entretiempo las críticas de todos los hinchas se centraron en el lateral por su flojísima labor, una situación que se vio influenciada además con el hecho que además finaliza contrato a fin de año y por ahora no hay acuerdo para su renovación.
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