Islandia, el único país del planeta sin mosquitos, perdió ese estatus luego de que se confirmara la presencia de ejemplares en las afueras de Reikiavik. La detección se dio tras una primavera con temperaturas inusualmente altas.
Según informó la BBC, el hallazgo fue realizado por el entomólogo aficionado Björn Hjaltason, quien vio los insectos mientras realizaba estudios de polillas con cuerdas empapadas en vino. En pocos días capturó dos hembras y un macho que luego fueron identificados como Culiseta annulata, una de las pocas especies capaces de sobrevivir al invierno.
El Instituto Islandés de Historia Natural confirmó la identificación a través del especialista Matthías Alfreðsson, quien explicó que el mosquito es común en Europa y el norte de África. Sin embargo, no está claro cómo llegó a Islandia.
Hasta ahora, solo Islandia y la Antártida eran zonas oficialmente libres de mosquitos. El clima frío y la falta de agua estancada habían impedido su reproducción.
Este año, el país rompió varios récords de temperatura. En mayo se registraron 26,6 °C en el aeropuerto de Egilsstaðir, el valor más alto de su historia para ese mes. El Servicio Meteorológico local informó además que el umbral de 20 °C se mantuvo durante diez días seguidos, una anomalía para la región.
Según el Global Heat Health Information Network, estos cambios podrían tener un impacto “significativo” en ecosistemas que evolucionaron bajo condiciones frías y estables.
Hjaltason sospecha que los insectos pudieron llegar en barcos o contenedores, ya que vive cerca del puerto industrial de Grundartangi. “Si tres aparecieron en mi jardín, probablemente haya más”, comentó al medio Morgunblaðið.
Las autoridades prevén realizar un seguimiento en primavera para determinar si la especie logró instalarse de forma permanente o todavía tienen suerte.