«Prianistas y ‘whitexicans’ se apropiaron de la protesta»: Hablan jóvenes de la marcha de la Gen Z en México

La movilización del último sábado en contra del Gobierno de México y del partido Morena, en la que participaron unas 17.000 personas, contó con asistentes muy disímiles. Aunque originalmente fue autoproclamada como una marcha de la Generación Z, hubo muchos participantes de otros sectores, lo que también diversificó las consignas.

El Universal recogió testimonios de jóvenes que dieron su visión sobre lo sucedido en la marcha. Entre ellos, Eduardo Corona, un estudiante de 20 años de Monterrey, reconoció que sus motivaciones «no coincidían del todo» con la de muchos otros participantes y señaló que la presencia de los integrantes de la denominada Gen Z fue reducida, mientras que «prianistas y ‘whitexicans’ se apropiaron de la protesta». Por eso, considera que los objetivos iniciales de la manifestación fueron tergiversados.

Según comentó, la movilización del sábado tuvo todo tipo de consignas, como exigir mayor seguridad, pero la propuesta central fue la de revocar el mandato de la presidenta Claudia Sheinbaum.

Presencia partidaria

Aunque el diario local menciona que la manifestación fue respaldada y promocionada por el expresidente Vicente Fox, del Partido de Acción Nacional, participantes aseguraron que la marcha no fue subsidiada por la oposición. Así lo destacó el estudiante de Ciencias Políticas Óscar Venancio, de 25 años, quien dijo que los asistentes fueron «porque quisieron y con sus propios medios».

«No fue sostenida por partidos, sino que fue impulsada por grupos empresariales, sobre todo por el Grupo Salinas», comentó, en referencia al conglomerado de empresas opositor al Gobierno. 

Respecto de los participantes, detalló que «hubo una población considerable que eran ‘millenials’ o generación X«, aunque «más de la mitad de las personas» sí correspondían a la Generación Z, que había convocado a marchar. «Cuando se enfrentaron a los policías, cuando se rompía algo, cuando se grafiteaba, se movilizaba o acontecía algo, éramos gente de la Generación Z», aseguró.

«En esta marcha pude ver gente de distintos espectros políticos y preferencias. Obvio no podían faltar las personas que se asemejan al arquetipo de ‘whitexican’, pero también vi universitarios, mamás, gente que venía del trabajo», continuó su relato.

Entre las motivaciones que mencionó para manifestarse, habló de la crisis de salud y de la «descarada presencia del crimen organizado». No obstante, sostuvo que el objetivo no era «derrocar al Gobierno».

Críticas a la Cuarta Transformación

El último de los testimonios compartidos por El Universal fue el de Sebastián Pedroza, un estudiante de 20 años de Administración de Empresas. Según dijo, la motivación para salir a las calles fue «sobre todo en contra de los malos gobiernos de la Cuarta Transformación«, proyecto impulsado por Morena.

«Harto de ver cómo violan constantemente los derechos humanos y la Constitución que juraron guardar y hacer guardar; harto de que no hagan programas en beneficio de todos, sino solo de unos cuantos; harto de que mi opinión valga menos por estudiar en una universidad privada, ser hombre, blanco y no ‘vivir las cosas que vive el pueblo en general'», señaló al explicar por qué decidió sumarse a la marcha.

Al hablar sobre la participación, dijo que «hubo de todo»: «No es sólo una generación la que está harta. En todas las generaciones hay personas inconformes. No todos están hartos, pero el descontento sí es grande».

«No eran jóvenes»

Sheinbaum aseguró este lunes que «la gran mayoría» de los asistentes a la marcha «no eran jóvenes de la Generación Z» y advirtió que había «caras muy conocidas» de la oposición. «Muchos adultos, pocos jóvenes», expresó.

La mandataria habló además sobre la violencia que se generó y sostuvo que fue provocada por un grupo minoritario que llevaba esmeriles, ganzúas y martillos, y que fue enfrentado por la Policía. «Los jóvenes mexicanos no son violentos«, resaltó. «¿Esa violencia de dónde vino? ¿Por qué este grupo se va contra la Policía? […] ¿Están pagados?», se preguntó.

«No vamos a caer en la provocación. Las y los mexicanos no quieren la violencia […] por más compleja que sea la circunstancia, nosotros no reprimimos […], quienes llamaron a la movilización también deben deslindarse de la violencia», concluyó la presidenta. 

Por los enfrentamientos, unas 20 personas fueron detenidas, mientras al menos 100 policías y 20 manifestantes sufrieron heridas.