Un partido de la categoría de 12 años de baby fútbol entre Defensor
y San Carlos, enmarcado en la Liga Fernandina, terminó con un violento final:
el árbitro Diego Vera denunció haber sido golpeado por padres del cuadro
carolino.
En diálogo con FM Gente, el docente deportivo narró que fue
atacado por padres y madres de San Carlos después de que lo acusaran de haber
tenido “malos modos” y de que un mayor de edad fuera expulsado de la cancha por
“incitar a la violencia”.
Vera negó las acusaciones y contó que fue golpeado cuando se
retiraba de la cancha de San Carlos e intentaba subirse a su auto”. “Me
intercepta ese padre que había sido expulsado de la cancha y ahí es donde se
desenlaza un cruce de palabras entre él y yo, en el que me manifestó la
inconformidad del arbitraje y que yo dejaba pegar a los niños ahí”, dijo el
árbitro.
Según el relato de Vera, el hombre le “tiro una piña que no
llegó a destino”, pero luego “le pegó en la cara”. En ese momento, el árbitro
devolvió el golpe y sacó al agresor del cuello.
De inmediato, el docente afirma haber recibido otra cantidad
de golpes de varias personas, entre las que había “un tumulto” de padres y
madres de los jugadores. Vera sostiene que recibió una patada en la nariz, que
le causó una hemorragia.
Vera fue rescatado por otros padres, que lo asistieron con
gasa y agua oxigenada. “Hace 17 años soy árbitro, también soy docente
deportivo, soy entrenador de golero por el cual trabajo con varias
instituciones acá en Maldonado. El que me conoce futbolísticamente acá y como
docente sabe el tipo de persona que soy con los niños. En ningún momento
insulté a nadie”, afirmó.
Tanto el árbitro como el padre involucrado en la pelea
presentaron la denuncia del hecho ante la Policía, que investiga qué fue lo que
ocurrió.
Otro hecho de violencia
El pasado 10 de noviembre, la Policía
de Maldonado informó que está investigando una brutal riña entre
jugadores de fútbol que se dio el pasado domingo entre quienes vestían la
camiseta de Atlético Fernandino y San Carlos, en un encuentro que terminó
2-2.
Al terminar el partido, y luego de varios minutos de
discusión, se desató la trifulca, que incluyó piñas y lanzamiento de
palas que algunos encontraron en la zona.
La pelea escaló tanto que, en determinado momento, varios
jugadores terminaron en el techo del vestuario. Desde allí pretendían
tirar objetos a sus oponentes; sin embargo, estos subieron y continuaron
golpeándose con los puños.
La Policía acudió a la escena el domingo, pero no había
nadie. Tras la difusión de videos, publicados en primera instancia por FM
Gente, comenzaron las indagatorias.