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Nahuel
Herrera se retiró sentido de la primera final clásica por el Campeonato Uruguayo entre Peñarol y Nacional cuando apenas transcurrían 2 minutos de juego este domingo en el estadio Campeón del Siglo, donde aurinegros y tricolores empataron 2-2.
El zaguero aurinegro disputaba una pelota con el nigeriano Christian Ebere y, en su afán de marcarlo para cerrar, cayó mal sobre su hombro izquierdo. De inmediato, pidió asistencia médica y terminó siendo sustituido por Emanuel Gularte, por lo que miró prácticamente todo el encuentro en el banco de suplentes.
El primer diagnóstico indicó que Herrera, al que le terminaron colocando el hombro nuevamente y observó el partido con un cabestrillo, sufrió una luxación en dicha zona. Desde Peñarol hay optimismo a que llegue a la revancha del próximo domingo a las 16:30 horas en el Gran Parque Central.
El directivo aurinegro Alejandro González se refirió a lo que manifestaron desde la sanidad de Peñarol, y mostró optimismo en que el zaguero llegue a la segunda final. “Nos dieron buenos augurios. Somos optimistas”, afirmó el dirigente este lunes en el programa Vamos que vamos de El Espectador Deportes 810 AM.
“Lo que le pasó fue que se dislocó el hombro. Tenemos que esperar 48 horas, para que baje la inflamación. Mañana [martes] se cumplirán [esas 48 horas]”, contó González.
Sobre la situación de Milans, que también terminó sentido, afirmó que probablemente el lateral llegue a estar a la orden el domingo: “Fue más parte del cansancio y de un tema físico que por una lesión, así que entiendo que llegaría”.
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