Israel
anunció este sábado el cierre de las escuelas en todo el país y restricciones
de reuniones públicas por motivos de seguridad, tras las amenazas de ataque por
parte de Irán.
El primer
ministro Benjamín Netanyahu dijo que su país está preparado para un “ataque
directo”.
A partir
del domingo, primer día de la semana en Israel, se suspenderán “las actividades
educativas, las excursiones y las salidas” escolares y extraescolares, indicó el portavoz del
ejército, Daniel Hagari.
La medida
fue tomada “teniendo en cuenta la situación de la seguridad” y estará vigente
el domingo y el lunes.
Como parte
de estas restricciones, también se cerrarán los centros recreativos y se
cancelarán las excursiones.
En vistas
del Pésaj, la Pascua judía, las reuniones al aire libre se limitarán a 1.000
personas, con un número aún menor en las regiones fronterizas, donde se
cerrarán las playas.
Las
actividades comerciales no se verán afectadas por las medidas.
Hagari
pidió a la población mantener su nivel de “vigilancia y responsabilidad”.
“Los
sistemas de defensa y ataque de la fuerza aérea están en alerta y decenas de
aviones patrullan los cielos, preparados y listos (…). Tenemos un excelente
sistema de defensa antiaérea, pero la defensa no es hermética”, añadió.
El
canciller israelí, Israel Katz, canceló un viaje previsto a Austria y Hungría
con familiares de rehenes retenidos en Gaza por el movimiento islamista Hamás
desde el 7 de octubre.
Irán
prometió represalias por el bombardeo del 1º de abril contra su consulado en
Damasco, que atribuyó a Israel. En ese bombardeo murieron siete miembros de los
Guardianes de la Revolución, el ejército ideológico de la República Islámica,
dos de ellos con el grado de general.
El
presidente estadounidense, Joe Biden, afirmó el viernes que preveía que Irán
tomara represalias “más pronto que tarde”.
AFP