Las empresas de software Arm y Qualcomm están en una disputa
legal, en la que la primera busca cancelar el acuerdo de licencia de
arquitectura (ALA) de su par, según consignó ExtremeTech.
Esta licencia le otorga el poder a Qualcomm de diseñar los
núcleos de CPU que la han convertido en uno de los fabricantes de chips más
valiosos del mundo.
Si las empresas no llegan a un acuerdo en 60 días, Qualcomm
podría verse obligada a dejar de enviar la mayoría de sus productos.
La disputa se remonta a tres años atrás, cuando Qualcomm
adquirió Nuvia, que diseñaba chips Arm personalizados para servidores. Nuvia
tenía un acuerdo de licencia tecnológica (TLA) para modificar los núcleos de
referencia Arm y un ALA para diseñar núcleos personalizados compatibles con
Arm. Cuando Arm le otorgó las licencias a Nuvia en 2019, lo hizo con la
condición de que no pudieran transferirse a otra entidad.
Qualcomm compró Nuvia en 2021 por 1.400 millones de dólares,
lo que le dio acceso a los diseños de núcleos personalizados de la empresa. Arm
consideró que esto era una transferencia y canceló la licencia de Nuvia,
diciéndole a Qualcomm que tenía que renegociar un acuerdo de licencia, pero
Qualcomm sintió que su propia ALA cubría a la subsidiaria de Nuvia. Arm demandó
a Qualcomm en 2022, y ese caso aún está en curso.
Es posible que Qualcomm no pueda seguir produciendo sus
diseños. Según Bloomberg, Arm ha notificado a Qualcomm con 60 días de
antelación que se le revocarán sus licencias Arm. Esta medida paralizaría a
Qualcomm, que obtiene la mayor parte de sus 39.000 millones de dólares en
ingresos anuales de los chips cubiertos por los acuerdos de licencia de Arm.
Arm exige que Qualcomm destruya todos los diseños de Nuvia
creados antes de la adquisición, ya que afirma que su licencia con Nuvia
prohíbe estrictamente la transferencia de tecnología basada en Arm sin permiso.
La última escalada se produce antes del juicio, cuyo inicio está previsto para
el 16 de diciembre.
Desde Qualcomm dijeron a Bloomberg que cree que esta
medida es un intento de “perturbar el proceso legal, y su demanda de rescisión
es completamente infundada”.