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todaydiciembre 8, 2024
La situación financiera de la empresa República Ganadera es espejo de la del Grupo Larrarte: inversores que vuelcan ahorros en una empresa dedicada a este rubro y una consecuente apropiación indebida que se traduce en que, en ambas empresas, el ganado, supuestamente adquirido por los inversores, no existe. Entre ambas empresas, la apropiación indebida suma unos 150 millones de dólares. (leer articulo de G. Mayo)
A los pocos días del comunicado del 27 de noviembre, inversores de República Ganadera S.R.L. presentaban denuncias contra la empresa. Según los denunciantes, República Ganadera expresó a uno de los inversores no poder cumplir con la renta fija prometida y falsificó su firma en guías de ganado del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) que ofician como equivalentes a títulos de propiedad.
Según la denuncia del inversor, poseía “las guías en blanco” en su casa, pero en la página del MGAP éstas aparecían firmadas y él personalmente nunca aprobó los documentos.
En el mismo caso, y todo de acuerdo con la versión del inversor, tenía más de 40 cabezas de ganado a su nombre y, de esas, 23 murieron. Si bien esto está contemplado en el contrato que firmó con República Ganadera, allí se dice que, en caso de que suceda, se repondrán los animales en un plazo de 60 días. El inversor denuncia que nunca se le notificó de la muerte de los animales.
Los otros dos denunciantes son una pareja; la mujer fue la primera en depositar U$S 100.000 y recibía una renta fija anual de alrededor del 10 %. Luego, su esposo invirtió U$S 80.000 y en su caso nunca se le pagó el valor prometido. A los meses, a ella también le dejaron de pagar la renta fija acordada.
República Ganadera S.R.L. gestionaba 78 millones de dólares en inversiones. De esos 78 millones, 25 millones responden a ganado y el resto a captaciones de mercado cercanas a los 50 millones de dólares.
Los que reciben el impacto de estas decisiones y dificultades financieras son los inversores y productores.
Luego de presentarse a concurso voluntario, la compañía Conexión Ganadera emitió un comunicado diciendo que realizaría una auditoría sobre República Ganadera con el objetivo de analizar una posible solución a la situación económica de la empresa.
Gustavo Basso y Pablo Carrasco de Conexión Ganadera estaban al frente de las conexiones con República Ganadera S.R.L., pero el 28 de noviembre, en un accidente de tránsito en ruta 5, falleció Basso.
República Ganadera vuelve a emitir un comunicado el 3 de diciembre, donde, entre otros conceptos, expresa a los clientes que la idea es seguir con el plan trazado al comienzo y que, si bien la muerte de Basso puede retrasar algunos días la propuesta, siguen pensando en que la participación de Conexión Ganadera en una reestructura financiera es una alternativa viable.
Sin embargo, ese mismo 3 de diciembre Pablo Carrasco, en nombre de Conexión Ganadera, anunció que, “terminada la transición, que creemos será muy breve, volveremos a la operativa normal, y nos pondremos al día con las cancelaciones e intereses que corresponden. Por eso pedimos disculpas, pero son temas burocráticos ajenos a nuestra autonomía”, expresa el comunicado firmado por Pablo Carrasco, y aclara que “frente a varias consultas, queremos reafirmar que queda abortada la iniciativa de tender la mano a nuestros inversores que tenían inversiones en República Ganadera porque nos dedicaremos exclusivamente a nuestros inversores con quienes nos pondremos al día tras este inconveniente burocrático”.
Como su nombre lo indica, el negocio de estas empresas es conectar distintas partes de la cadena cárnica y ofician más como una financiera, un escritorio rural o consignatario de ganado, aunque también estos últimos pueden ser clientes de la “conexión”.
Pero el núcleo duro del negocio se basa en inversores que deben estar registrados y usando la figura de DICOSE usado por inversores, que son tenedores/propietarios de ganado, pero sin campo.
El número de DICOSE es un número de registro único e irrepetible en el MGAP adjudicado a una razón social que es tenedor de ganado, con o sin tenencia de la tierra. Una vez habilitado, tenga tenencia o no de animales, está obligado a presentar la declaración jurada anual entre el 1° y 31 de julio de cada año.
Los negocios como Conexión Ganadera reciben el capital (ganado) y se basan en que el inversor tiene la propiedad del ganado.
Los inversores pueden llevarse los animales en cualquier momento sin perjuicio de los contratos, y eso pasa cuando los inversores se atemorizan, cuando el negocio deja de dar la rentabilidad esperada o ante inclemencias del tiempo o pestes.
Los negocios conectan, entonces: i) tenedor de campo sin ganado (puede ser un arrendatario); II) tenedores de ganado sin campo; iii) un acuerdo de manejo del ganado (cría, engorde, reproducción) que achique costos con la menor cantidad de enajenaciones y que tenga chance de hacer negocios de colocación de ganado para faena (envío al frigorífico).
Algunos más arriesgados llegan incluso a hacer adelantos de utilidades, sin perjuicio de que los inversores tienen aseguradas utilidades de base.
Los «conexiones» que arman el negocio pueden hacer buen dinero, pero usando capital de otro, y por eso los «conexión» siempre va a reclamar liberalización, para que los privados hagan negocio y el Estado se meta lo menos posible. De hecho, no quedan claros los alcances de los controles del Banco Central.
En el caso de Conexión Ganadera, según su página web: “El respaldo de la inversión lo constituye el ganado, cuyo valor se incrementa anualmente. Los derechos del inversor sobre el capital invertido y sus beneficios se obtienen del cobro de la venta de los animales al final del contrato. Este valor supera holgadamente la parte que corresponde al inversor, y de ahí que el respaldo sea tan robusto, al punto de minimizar los riesgos del inversor, aun en situaciones extremas como la aftosa del año 2001 o la sequía del año 2009. Los animales propiedad del inversor aumentan su valor en casi un 100 % por año. De este crecimiento, solo una parte mínima es la que el contrato reconoce como derecho del inversor. Es por esta razón que se utilizará el crecimiento físico y de valor de los animales sobrevivientes para reponer los animales que hayan muerto o el precio que se haya deteriorado en el transcurso del contrato”.
Si, como denuncian algunos inversores, hubo adulteración de guías o expedición de guías falsas, la sección Servicios Ganaderos del Ministerio de Ganadería tendrá que dar algunas explicaciones.
Hasta la fecha de esta publicación, el director de dicho servicio no se ha comunicado con Caras y Caretas, ya que queríamos entender en qué momentos se expiden las guías y se realiza el caravaneo de los animales. (DICOSE y el Sistema Nacional de Información Ganadera).
El costo dependerá de la evaluación de la calidad de los bovinos. Ésta incluye variables como: peso, sexo, edad, genética, conformación y grado de terminación.
Precios en dólares americanos, al contado y sin descuento financiero.
Categoría Máximo Mínimo
Terneros y terneras 2.730 1.900
Novillos 1 a 2 años 2.580 2.100
Novillos 2 a 3 años 2.270 1.970
Novillos más de 3 años 2.100 1.980
Escrito por hiperactivafm
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