play_arrow

keyboard_arrow_right

Listeners:

Top listeners:

skip_previous skip_next
00:00 00:00
chevron_left
  • play_arrow

    Hiperactiva Escucha a diario toda la música de moda, con los grandes éxitos de conocidos artistas internacionales, en esta emisora online que retransmite al resto del mundo desde Minas de Corrales, Uruguay.

Noticias Nacionales

Petróleo, la obra insigne de Piel de Lava, llega al Solís

todaymarzo 3, 2025

Fondo



¿Cómo es el trabajo del grupo Piel de Lava? ¿Cómo vienen desarrollando esta sinergia y cómo proponen las obras que van a presentar?

Nosotras llevamos 20 años trabajando juntas. Escribimos, dirigimos y actuamos nuestros propios materiales. Nos conocimos en nuestra etapa de formación, en talleres, en un momento en que en Buenos Aires estaba en auge la idea del actor como productor de sentido, no sólo como un mero vehículo de representación. Los actores comenzaban a tomar la escena con creaciones y poéticas propias. Venimos de esa generación y nos conocimos así, actuando, pero con una fuerte vocación por la creación colectiva.

Quizás la particularidad de nuestro grupo frente a otras compañías, más allá de que el teatro es una actividad colectiva, es que escribimos, dirigimos y actuamos sin una jerarquía externa. Nuestro trabajo se basa en una dinámica horizontal, donde los materiales se desarrollan en un proceso de improvisación y escritura sin que haya alguien comandando el proceso. La mayor hazaña ha sido tomar todas las decisiones creativas entre cinco personas, lo que implicó un aprendizaje constante y terminó marcando nuestra manera de vincularnos.

Es decir, las distingue un fuerte trabajo colectivo y de creación.

Exacto. Hay muchas compañías de teatro, pero lo que nos diferencia es la búsqueda de una horizontalidad real en todos los procesos. No queríamos que, llegado el momento de la dirección, una persona tomara las decisiones de manera unilateral. En muchos grupos sucede que se juntan a improvisar, pero luego alguien debe ordenar el material. En nuestro caso, el desafío fue cómo organizar ese caos desde adentro y generar teatralidad sin perder la esencia colectiva.

¿Cómo fue el proceso de creación de Petróleo?

Petróleo fue un proceso particular porque somos un grupo de teatro independiente, y esta fue la primera vez que trabajamos en el ámbito del teatro público. Fue un proceso muy largo y la única obra que ensayamos todos los días durante dos meses. Este nuevo esquema de producción nos hizo muy bien. Notamos cómo el trabajo crecía con la práctica diaria, algo que para un grupo independiente era una novedad. Funcionó muy bien nuestra dinámica de improvisar, escribir, volver a improvisar y reescribir, mientras realizábamos una investigación en paralelo sobre el universo del petróleo y el mundo del trabajo en el que nos íbamos a sumergir.

Nuestros procesos son complejos y se desarrollan en distintos niveles simultáneamente. Muchas veces improvisamos y luego una de nosotras se lleva la escena para escribirla. Después, otra compañera retoma ese material y lo reescribe. Se vuelve a probar en escena, en un proceso muy artesanal donde los roles se van rotando dentro del grupo.

Primero surgió el deseo de interpretar varones, nos interesaba indagar en los estereotipos masculinos. Luego nos preguntamos qué tipo de trabajo podría representar mejor un universo masculino por excelencia, y así llegamos al petróleo.

Es interesante que Petróleo explora la construcción de la masculinidad. ¿Cómo se fueron construyendo desde esa perspectiva, explorando el género y los estereotipos?

Hubo distintas etapas en el trabajo. Una más lúdica, que tenía que ver con la risa que nos generaba ver a nuestras amigas vestidas de varón, tratando de construir una masculinidad posible en escena. Y luego, una etapa más compleja, en la que, a medida que esa masculinidad aparecía, surgían muchas preguntas sobre los géneros, sobre qué es ser un hombre o una mujer y sobre los mandatos. Casi te diría que los ensayos hicieron que empezaran a aparecer estas preguntas sobre la masculinidad desde la propia experiencia, desde la práctica misma de intentar representarla.

Eso fue lo más rico, lo que comenzó como un juego, a veces terminaba generando angustia al darnos cuenta de lo coercitiva que podía ser la fisicalidad femenina en comparación con la masculina. Cuando empezaron a aparecer los varones en escena, notamos una mayor amplitud física, la posibilidad de ocupar más espacio con el cuerpo, de estar menos pendientes de la mirada del otro. Para que esos varones aparecieran en nuestros cuerpos, nos llegaba una información dolorosa: qué restringido está el cuerpo femenino en su comportamiento. Fue una experiencia reveladora. Por ejemplo, hacíamos un ejercicio básico de pasar en cuatro pasos de un eje que considerábamos femenino a uno masculino, y era impactante habitarlo en el cuerpo y ver cómo este se expandía y establecía otra relación con el espacio.

¿Y cómo ha sido la recepción del público en otras ciudades?

Te diría que es nuestra obra estrella. La presentamos en muchos países y ciudades, y siempre genera una empatía especial con el público, lo que nos pone felices. Tenemos muchas ganas de ir a Uruguay. Ya habíamos estado con Parlamento, nuestra última obra, pero no con lo que consideramos nuestro «hit», que es Petróleo. Para nosotras, es una obra que genera mucha conexión con la gente, un espacio de celebración.

Creo que Petróleo produce una risa catártica porque, aunque toca un tema áspero, lo hace con muchísimo humor. Eso ayuda a descomprimir ciertas cuestiones de género. En un momento, el público empieza a reírse y a darse cuenta de la tensión que implica sostener un género, de hasta dónde hay que esforzarse para mantenerlo. La puesta en escena tiene algo de grotesco que potencia la conexión con el espectador. Es una obra que habla de temas importantes, pero de una forma liviana y muy divertida, lo que creo que fue una gran combinación. Al público le encanta porque le permite abordar cuestiones profundas desde el humor y la distensión.

Laura, como actriz has trabajado también en cine y televisión. ¿Qué particularidades tiene el teatro que lo convierte en un espacio de exploración diferente a otros formatos?

Quizás tenga que ver con ese pacto tan primitivo de estar juntos en un espacio, en silencio, y aceptar colectivamente que lo que sucede en escena lo vamos a creer y crear entre todos. Eso todavía me sigue conmoviendo. En tiempos en los que cuesta tanto mover el cuerpo para realizar un acto que tenga algo de ritual, siento que el teatro es uno de los pocos ritos que quedan.

El público debe acercarse físicamente al teatro para que el hecho escénico suceda. No es algo que se pueda ver desde el sillón de casa como una serie; implica un esfuerzo, una participación activa en ese pacto teatral. Eso me parece impagable. Hay algo en esa experiencia que todavía me genera una emoción y una adrenalina que no comparo con nada.

¿Qué otros proyectos tiene previstos Piel de Lava?

Parlamento es la obra que hicimos después de Petróleo y aún es muy joven para nosotras. Fue una investigación sobre los parlamentos, el lenguaje político contemporáneo y la actividad parlamentaria. Como obra, tiene menos de un año de vida, así que recién ahora estamos disfrutando de hacer funciones sin seguir en etapa de ensayo.

Este viaje al Solís es un poco festivo, como una manera de cerrar un ciclo con Petróleo y seguir adelante con nuestra próxima obra, que todavía sentimos en su infancia.

¿Y para quienes aún no conocen la obra, por qué no deberían perderse Petróleo en el Teatro Solís?

Porque creo que es una oportunidad única de ver a un grupo en escena, y eso no me parece un detalle menor. Se trata de un grupo que lleva muchos años trabajando junto, y esa experiencia se nota en el escenario. A veces, cuando uno va al teatro, la prioridad puede estar en ver a una figura en particular, un actor que te gusta mucho, o en disfrutar de un texto porque se trata de una obra clásica.

En este caso, Petróleo es una obra contemporánea en la que lo que se ve en escena es una maquinaria grupal funcionando. Es como asistir a un concierto de una banda que lleva 20 años tocando junta, hay una química especial y una dinámica construida a lo largo del tiempo.

Me cuesta decirlo yo misma, pero creo que eso es algo que al público puede llegar a gustarle mucho. Siento que cuando la gente aplaude al final, también está aplaudiendo el trabajo colectivo, la creación de un grupo que ha construido algo en conjunto. Hay algo en eso que la hace especial.

Embed – Petróleo





Fuente

Escrito por hiperactivafm


0%