Congresistas piden darle luz verde a Trump para armar a Israel con bombarderos B-2

Publicado:
2 jul 2025 23:59 GMT

De prosperar la propuesta, el mandatario estadounidense tendría la autoridad de «tomar medidas que garanticen que Israel esté preparado para cualquier escenario».

Legisladores bipartidistas de EE.UU. han propuesto dar luz verde al presidente de su nación, Donald Trump, para que proporcione a Israel acceso a los bombarderos furtivos B-2 y las bombas antibúnker GBU-57, a fin de impedir el avance del programa nuclear de Irán, informó este miércoles FoxNews.

Una propuesta legislativa en ese sentido fue presentada por el demócrata Josh Gottheimer y el republicano Mike Lawler. Según el proyecto, denominado Ley de Demolición de Búnkeres, el mandatario estadounidense tendría la autoridad para «tomar medidas que garanticen que Israel esté preparado ante cualquier escenario» y así dotar al país hebreo de las herramientas necesarias para disuadir a Teherán de avanzar con su programa nuclear.

Gottheimer había ya presentado ese proyecto de ley dos veces, primero en 2022 y luego en 2024. En ninguna de las dos ocasiones pasó del pleno de la Cámara.

Si bien el documento no menciona armamentos en particular, se cree que podría aludir al bombardero furtivo B-2, capaz de penetrar los sistemas de defensa más sofisticados, y a los proyectiles GBU-57, conocidos también como ‘padre de todas las bombas’, diseñados para destruir instalaciones subterráneas fuertemente reforzadas.

• El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció el 21 de junio que la Fuerza Aérea de su país había completado un «exitoso ataque» contra las instalaciones nucleares de Fordo, Natanz e Isfahán, en Irán. Más de 125 aeronaves militares estadounidenses participaron en el operativo. Los bombarderos B-2 atacaron Fordo y Natanz, mientras que submarinos atacaron con misiles Tomahawk a Isfahán. 
• Una evaluación interna de inteligencia de EE.UU., filtrada a la prensa, consideró que los ataques efectuados contra sitios nucleares iraníes en medio de los bombardeos cruzados entre Tel Aviv y Teherán, solo retrasaron el programa nuclear de Teherán por apenas seis meses.

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