«Regálemela»: El comentario sobre una niña que desató ira contra el presidente de Costa Rica

El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, fue blanco de duros cuestionamientos por parte de diferentes sectores de la sociedad nacional esta semana a raíz de un comentario en un reciente acto público, de acuerdo con medios locales. 

Durante un recorrido a pie por la provincia de Guanacaste, una niña se acercó a saludarlo. El mandatario centroamericano se agachó para prestarle atención y luego le dijo a la hermana mayor de la pequeña, que la acompañaba: «Regálemela y se la devuelvo cuando se gradúe de la universidad». La escena quedó registrada en un video que circula en los últimos días en redes sociales.

Estas palabras fueron consideradas más que una simple broma o un comentario inocuo. Figuras del ámbito político nacional y activistas contra el abuso infantil y la violencia de género cuestionaron el tono y contenido de su frase. Ni Chaves o la Presidencia de la República ni instituciones costarricenses como el Patronato Nacional de la Infancia y el Instituto Nacional de las Mujeres se han pronunciado al respecto.

«Perturbador»

Carolina Delgado Ramírez, presidenta de la Comisión de la Mujer de la Asamblea Legislativa, afirmó que se trató de un acto de «violencia simbólica» que «normaliza el abuso y la desigualdad, y que expone a una niña a una situación inaceptable». Al mismo tiempo, la ex primera dama y candidata presidencial Claudia Dobles aseguró que «no existe ningún contexto o circunstancia en la que sea aceptable que un hombre adulto siquiera bromee con que ‘le presten’ a una niña o un niño». 

En un artículo periodístico, la diputada de Liberación Nacional Montserrat Ruiz calificó lo ocurrido como algo «perturbador». «No puede relativizarse como un simple chascarrillo. No cuando esa frase coloca a una niña en el centro de una escena que vulnera su dignidad«. Al respecto, Gioconda Batres Méndez, experta regional de la ONU en el tratamiento del abuso infantil y la violencia de género, dijo que «las niñas no se prestan, no se regalan, no se negocian ni se disponen al antojo de nadie».