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“Si no le va bien, termina en un semáforo”, dijo Germán Burgos sobre el
joven Lamine Yamal en la previa del partido que Barcelona ganó por 3-2 sobre
París Saint Germain a domicilio el pasado miércoles. Esa frase le costó la
desvinculación de Movistar + y muchas críticas.
Este lunes de noche, en los micrófonos de Radio Marca, el exarquero y
actual entrenador argentino rompió el silencio y explicó que su comentario
quiso ser gracioso y al mismo tiempo un halago hacia el crack culé de 16 años.
El comentario iba sobre el talento y la habilidad del jugador. La gente no escuchó
el audio completo. Como sigue el audio es un tono afectivo. Es más, yo rompo
con el humor”, explicó el Mono, quien dijo haber hablado con Joan Laporta,
presidente del Barcelona, para que le hiciera saber a Yamal “que lo que quería
era mandarle un halago”.
Pese a todo, entendió la decisión de Movistar porque “la empresa tiene que
actuar”. “Todavía uso Movistar. No me voy a cambiar. Me volví con
dos productores del programa y les dije que yo me quitaba del medio”, aclaró
Burgos, quien apeló a su apodo para desprenderse de algunas etiquetas que le
pusieron en los últimos días.
“Si hay algún director de comunicación o alguna facultad que quiera ver
este tema, solo le digo que a mí me dicen Mono. Mi apodo rompe todo lo dicho y
manifestado”, sostuvo, y recordó que su sentido del humor ha sido siempre el
mismo, aún cuando jugaba como futbolista y le tiraban de todo desde las tribunas.
“Me han tirado orín y les dije: ‘Ya probé la lluvia dorada, por favor
insúltenme’. El arquero no se puede ir. Está siempre recibiendo estas
situaciones. Hay gente que no me conoce y puede tomarlo como se lo dice”,
concluyó.
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