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“Estoy con muchas expectativas.
Fue el club que me formó, al que llegué con 13 años. Tuve un corto pasaje [en
Primera División], quizás más inmaduro. Ahora llega otro Alejo, más maduro, con
más partidos arriba y con otra cabeza”, dijo Alejo Cruz este martes de
noche al arribar a Uruguay para ponerse a las órdenes de Peñarol.
El zurdo extremo de 24
años llega en condición de libre tras rescindir con Atlético Goianiense
y tendrá su revancha tras haber jugado apenas siete partidos con la camiseta
aurinegra en el primer semestre de 2022, bajo las órdenes de Mauricio
Larriera.
“Cuando llegás con 13 años querés
llegar al primero y jugar, pero no fue mi caso. Se me dio de salir y me fue
bien afuera. Con tantos partidos encima uno va agarrando madurez en el exterior,
donde el fútbol es diferente”, destacó.
Jugó el último año y medio en el
fútbol de Brasil, que “hoy está entre los mejores del mundo”. “Juegan y
corren todos. Si no te adaptás rápido es complicado agarrar continuidad. Yo
tomé esa continuidad y creo que estoy bien”, añadió.
“Tenía llamados de afuera y
chances de quedar en serie A de Brasil, Grecia y Portugal,
pero hace tres o cuatro días me dijeron del interés de Peñarol y les
dije a mis empresarios que esperaran porque prefería venir acá que seguir en el
exterior”, explicó.
El momento carbonero
también lo motiva. “El año pasado hicieron una buena campaña, salieron campeones
uruguayos y quedaron entre los cuatro mejores de América. Se mantuvieron
bastantes jugadores y creo que el equipo está bien. Yo vengo a aportar desde
donde pueda”, comentó.
Consultado por las ganas de jugar
en el estadio Campeón del Siglo repleto, dijo que es “divino” y “lo que
uno sueña siempre”, por lo se mostró ilusionado de cara a lo que se viene. Hoy
se suma al plantel y ya empieza a trabajar de cara al Torneo Clausura y
la Copa Libertadores.
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