Un avión caza militar se estrelló contra un recinto escolar de Daca, capital de Bangladesh, este lunes y causó al menos 31 muertos, la mayoría niños, según los últimos datos oficiales.
El siniestro se produjo a mediodía, cuando un caza FT-7 BGI de la Fuerza Aérea de Bangladesh despegó a las 13:06 hora local desde la base aérea de Kurmitola, en un vuelo de entrenamiento rutinario.
Según las primeras evidencias señaladas por las autoridades, el aparato sufrió un “fallo mecánico” a los pocos minutos de comenzar su vuelo, y, aunque el piloto trató de desviar la trayectoria para evitar una tragedia mayor, terminó estrellándose contra un edificio de dos plantas del campus de la Escuela y Colegio Milestone, al norte de Daca.
Era el primer entrenamiento sin acompañante de Towkir Islam, el piloto del avión accidentado, y su familia, emocionada por el evento, tardó horas en descubrir que su hijo había fallecido en el momento del accidente, según informa el diario local Prothom Alo.
Cuando la aeronave se estrelló contra uno de los edificios del campus estudiantil, algunos alumnos ya habían abandonado el recinto, pero muchos otros se encontraban esperando a sus familiares o dentro de las aulas.
“Hubo un ruido repentino y ensordecedor. Ninguno de nosotros imaginó que se trataba de un accidente aéreo. Bajamos corriendo y vimos humo y llamas por todos lados”, narra una de las profesoras del centro, citada por el mismo medio.
El accidente provocó un incendio devastador que se cobró la vida de al menos 31 personas, 29 de ellas niños, además de una profesora y el propio piloto, según el último informe de la oficina de comunicaciones de las Fuerzas Armadas de Bangladés.
Al menos otras 165 personas resultaron heridas, muchas de ellas con quemaduras graves que aún están siendo tratadas en diversos centros hospitalarios de la capital.
Entre las historias que han conmocionado al país está la de un hombre que aún busca desesperadamente a su esposa, profesora del centro. En declaraciones recogidas por Prothom Alo, el hombre relata que nadie le ha confirmado si está viva o muerta.
“He buscado en todos los hospitales de Uttara, pero aún no la he encontrado. Tampoco está en la unidad de quemados. No sé dónde más buscar. Ni siquiera sé cómo explicárselo a nuestro hijo”, contó entre lágrimas frente a la morgue.
La profesora que figura entre las víctimas del accidente es ya un símbolo de valentía en medio de la tragedia. Según han relatado varios testigos a los medios locales, Maherin Chowhdury permaneció en el edificio hasta lograr evacuar al mayor número de alumnos posible.
Horas después, las graves quemaduras acabaron con su vida.
“Mi hermana mayor, quien me crio como una madre, acaba de fallecer. Era coordinadora en Milestone, no fue la primera en salir de su edificio cuando se incendió, sino que intentó sacar a todos los estudiantes posibles, pero terminó con quemaduras graves«, relató su hermano en un post de Facebook.
Pero al duelo se ha sumado también la rabia. Estudiantes de varias universidades salieron este martes a protestar en Daca, denunciando que las autoridades no anunciaron la suspensión de los exámenes programados hasta esta mañana, pese al estado traumático de muchos alumnos y la cercanía de las escuelas afectadas.
Las protestas, según recogió el Dhaka Tribune, derivaron en enfrentamientos con la Policía, que usó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes frente al campus de la Universidad de Daca.
La polémica ha llevado a la destitución del secretario de Educación, según confirmó el asesor de Información y Radiodifusión, Mahfuj Alam, en una publicación en Facebook.
El Gobierno interino declaró que considera “razonables” las demandas presentadas por los estudiantes y ha anunciado medidas concretas, como la creación de un centro de información sobre víctimas, programas de compensación y apoyo psicológico para las familias afectadas, según un comunicado oficial.
EFE