A Robert Silva y a Álvaro Delgado se les fue la moto
¡Por supuesto que esto se ha hecho otras veces (que un dirigente honre con sus palabras al fallecido cuando se trata de una persona pública); pero siempre se tuvo el cuidado, en todos los casos precedentes, de respetar la delgada línea fronteriza entre el homenaje y el proselitismo. La idea siempre fue que todos los partidos le despidieran dejando sus banderas en la puerta del cementerio y jamás se concibió […]