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Chelsea clasificó a cuartos de final del Mundial de Clubes tras vencer a Benfica 4-1 tras alargue en
Charlotte. El conjunto inglés será rival de Palmeiras el próximo viernes a las
22 horas, y el vencedor disputará la semifinal frente a Inter de Milán,
Fluminense, Manchester City o Al-Hilal.
Luego
de un comienzo en el que los dos equipos se estudiaban y no arriesgaban, llegó
la primera chance clara del partido a los 18’. Roméo Lavia colocó un balón en
profundidad para Liam Delap, quien ubicó en el segundo palo a Marc Cucurella.
El español enganchó, dejó en el piso a un rival y sacó un remate que iba al
ángulo, pero António Silva evitó el gol en la línea.
Dentro de un contexto de encuentro chato, Chelsea tenía las jugadas más claras, atacando por las bandas y proyectando a sus laterales. Lavia recibió en tres cuartos y dejó mano a mano a Cucurella, que malogró una nueva oportunidad por una gran atajada de Anatoli Trubin.
A los 63’ llegó el gol que abrió el tanteador a favor del conjunto inglés. Reece James sorprendió con un tiro libre lateral sobre el arco de Trubin, que regaló el primer palo y no alcanzó a evitar que la pelota se metiera en el fondo de la red.
Cuando se llevaban disputados 40 minutos del segundo tiempo, hubo una nueva interrupción por la activación del protocolo de tormentas, el mismo que ya ha obligado a retrasar otros cinco partidos. Una leve tormenta eléctrica en Charlotte hizo que el cotejo estuviera parado dos horas, y tras su reanudación empató el conjunto portugués. Una mano de Malo Gusto en el área londinense llevó al árbitro a pitar penal y el argentino Ángel di María lo capitalizó en el quinto minuto de adición.
A los 2’
del alargue, Gianluca Prestianni fue expulsado en el conjunto lusitano por
doble amonestación, luego de una falta cerca de su área sobre Levi Colwill. Eso
condicionó al Benfica, que pasó a defenderse y a apostar a contragolpes que no
pudo definir.
Chelsea
insistió, generó algunas situaciones y a los 108’ logró el 2-1. El ecuatoriano
Moisés Caicedo llegó al área a definir, el arquero Trubin no pudo
contener su disparo y en el rebote llegó Christopher Nkunku para ganarle la disputa a
Nicolás Otamendi y definir con toque corto.
Por si
fuera poco, a los 114’ liquidó el pleito Chelsea de contragolpe. Caicedo
recuperó la pelota en el círculo central y puso en carrera al portugués Pedro
Neto, quien llegó con tiempo y espacio para quedar cara a cara con el
guardameta y rematar de zurda contra un palo.
Tres minutos más tarde, otro contragolpe terminó en gol y transformó triunfo en goleada, cuando Kiernan Dewsbury-Hall selló el 4-1.
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