Una mujer de 33 años falleció tras ser atropellada por un conductor ebrio el pasado domingo en el municipio de Cotia, en el área metropolitana de la ciudad brasileña de San Pablo.
Según informaron medios locales, el siniestro ocurrió cuando Patrícia Correia de Melo caminaba con su madre y otras cinco personas tras salir de un servicio religioso.
Las imágenes de una cámara de seguridad muestran como el vehículo avanza a alta velocidad y sin control, impacta con otro auto y luego deriva hacia el grupo de peatones en el que se encontraba Correia de Melo, en la esquina de la calle Maria José Celestino Saad y la Estrada do Morro Grande.
De acuerdo con la información divulgada por la policía local, el vehículo era tripulado por un hombre de 61 años, que se encontraba ebrio y fue arrestado.
Otras cámaras de la zona muestran al vehículo circulando de manera errática nueve minutos antes de la tragedia, lo que demostraría que ya entonces el sexagenario no tenía dominio sobre el coche.
Patrícia Correia de Melo falleció instantáneamente tras ser arrastrada por el vehículo, y los demás heridos recibieron atención médica por diversas lesiones.
Según familiares, el lugar del accidente carece de una acera segura. La hermana de la víctima, Maria Betânia Gouveia de Melo, denunció que los peatones se vieron obligados a caminar por la calle debido a la presencia de escalones y árboles que obstaculizaban el paso. «Atropelló a siete
personas. Mi hermana murió instantáneamente, arrastrada y arrojada»,
declaró.
