En el marco del Mes de la Memoria, la muestra CONTÁcuarembo rinde homenaje a los desaparecidos de Tacuarembó durante la última dictadura civil-militar: Héctor Castagnetto, Luis Alberto Camacho, José Pedro Callaba y Gustavo Goycochea, así como a su esposa, la argentina Graciela Basualdo.
La exposición reúne obras alusivas a los desaparecidos que incluye cuadros, poemas y escritos realizados por familiares de los mismos, así como fotos, objetos, documentos y testimonios.
El libro “Héctor Castagnetto. Vivo en nuestra memoria”, editado por Sitios de Memoria, es parte de los trabajos por la memoria que intentan ampliar nuestra comprensión de los efectos de la violencia política y las acciones ilegítimas de agentes del Estado que atravesaron a toda la ciudadanía durante la dictadura civil-militar.
El texto recoge las ponencias de un conversatorio sobre “Violencias e impunidades de ayer y de hoy” realizado en 2021 en la sede del PIT-CNT, organizado por la Comisión Castagnetto, el Colectivo Verdad, Memoria y Justicia de Tacuarembó y la Secretaría de Derechos Humanos del PIT-CNT.
Este evento tuvo formato de conversatorio, y participaron del mismo Patricia Soria, presidenta de la Junta; Mauricio Zunino, intendente interino de Montevideo; Martha Mattos, integrante de la Comisión Castagnetto; el escritor Diego Cubelli; y los coordinadores de la editorial Sitios de Memoria Uruguay, Mariana Risso y Rodrigo Barbano.
Barbano destacó que el proyecto que “Sitios…” viene llevando adelante va más allá de ser un ejercicio de memoria. Su significación en el presente radica en la idea de que los procesos autoritarios como los sufridos durante el Terrorismo de Estado “no vienen de un día para otro”, y por eso hay que detectar en la actualidad, además de los discursos negacionistas del mismo, todo aquello que acarrea la pérdida de derechos, lo que ejemplificó con “agendas anti Derechos”, proyectos de ley de prisión domiciliaria para represores, y situaciones tales como persecución a estudiantes y docentes, presiones a la prensa, criminalización de la protesta o espionaje a representantes nacionales.
Para la presidenta Soria es necesario legar a las nuevas generaciones la lucha por verdad, memoria, justicia y por nunca más terrorismo de Estado.
Sostuvo que la llegada de la dictadura fue parte de un proceso, “de una democracia que se fue deteriorando, mientras nos fueron arrebatando los derechos y las libertades”. Para Soria, la historia de Héctor es prueba de ello, ya que su desaparición se produce en el año 1971, en plena “democracia represiva”.
Héctor Castagnetto desapareció cuando tenía 19 años. Era un militante estudiantil que cursaba bachillerato de Agronomía en Montevideo, lejos de su Tacuarembó natal. Fue secuestrado por el Escuadrón de la Muerte el 17 de agosto de 1971 cuando salía de su casa, en Av. Italia y Av. Batlle y Ordoñez, para entregar unos discos que había vendido el domingo.
El intendente Zunino profundizó en los discursos negacionistas del Terrorismo de Estado, ya que están tomando fuerza en la sociedad, y expresó “que lo debemos combatir no solo desde los movimientos sociales, sino también desde la institucionalidad, apelando a la reflexión y la memoria a partir de espacios como el generado en esta oportunidad” en la JDM.
La Junta Departamental de Montevideo viene desde hace mucho tiempo implementando políticas e impulsando diferentes acciones vinculadas al esfuerzo por la construcción de memoria colectiva del pasado reciente.
Entre otros, la Junta participó de los recordatorios ubicados en la plazoleta ubicada en el cruce de calles donde ocurrió el secuestro. En la actualidad esta plazoleta ofrece a visitantes y transeúntes un monolito con dos placas que cuentan la historia de Héctor. El monolito y la primera de las placas datan del 2005 y fueron aprobados por la Junta. La segunda, colocada en 2021, es una placa de la Ley de Sitios de Memoria y resultó de la acción conjunta de colectivos sociales, la Comisión Nacional Honoraria de Sitios de Memoria y la IM.
En 2022 la Junta autorizó la instalación de una planta en homenaje a Castagnetto, en el sitio donde se ubica su placa en reconocimiento.
De Junta Departamental de Montevideo