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La Justicia de Argentina recibió hace algunas horas una serie de mensajes que mantuvo el uruguayo Pablo Laurta, responsable de matar a su expareja, su exsuegra y un taxista, con una vecina del barrio Villa Serrana (Córdoba), donde vivían las mujeres.
La mujer, de nombre Laura, compartió los mensajes en sus redes sociales y las autoridades a cargo de la investigación los agregaron como parte de los elementos en contra del acusado.
En las capturas, se puede ver cómo Laurta le preguntaba a la mujer por Pedro, el hijo al que el hombre secuestró tras matar a las dos mujeres. “¿Has tenido alguna noticia de Pedro? ¿Cómo lo has visto?”, pregunta en un momento.
“La situación nos tiene a toda la familia paterna: abuelos, padrino, en vilo por no saber nada de él, luego de que Luna, después de incomunicarlo, reclamara dinero como condición para dejar verlo o recibir noticias”, indica otro mensaje.
Laurta también le dice a la vecina de las víctimas que su expareja la involucró en una declaración en el juzgado por la tenencia del menor. “Alegó que te mandé audios insinuando que me voy a llevar a Pedro por la fuerza. Quedate tranquila, que sé que vos no le dijiste eso y es ella la que está mintiendo”, envió el homicida.
Laurta le enviaba audios a la mujer en los que decía: “Si estuvieras en mi lugar y supieras lo que yo sé, estoy seguro de que harías todo lo que estuviera a tu alcance por sacarlo de ahí”.
El uruguayo relataba “el peligro” que implicaba para el niño que estuviera con su expareja. Ante esto, la vecina le ofreció darle su cuenta de banco para que pasara dinero y así ella se lo daba a la madre del menor.
“Dada la situación de peligro para su integridad en la que, de momento, permanece, sería un grave error consentirla y no es conveniente que contribuyamos de ninguna manera a perpetuar dicha situación”, respondió el hombre en otro de los mensajes enviados.
A su vez, detalló: “Sabemos perfectamente que él no está bien: que ha desarrollado trastornos en su comportamiento, en el habla, que en múltiples ocasiones ha mostrado señales de haber sido afectado psicológicamente, y que, en ese sentido, Luna tampoco está bien”.
Laura le aclaró al hombre que al niño no le faltaba nada y que es “alegre y curioso”. “Por esta guerra que creaste, te olvidaste de que un niño se viste, toma leche, se alimenta, desayuna, merienda, cena, va al médico, etc.”, respondió en un momento la mujer.
Uno de los últimos mensajes que envió Laurta dice: “Por acá estamos todos pendientes y, obviamente, dispuestos a [hacer] lo mejor con respecto a él. Luna tiene que entender que es un miembro de nuestra familia y por eso luchamos por él. No es una fuente personal de ingresos y no lo debe tratar así”.

Foto: captura de redes sociales

Foto: captura de redes sociales

Foto: captura de redes sociales

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