La senadora del Frente Amplio (FA) Blanca Rodríguez
reconoció a la Justicia uruguaya después de que condenara a 30 años de
cárcel al militar retirado Juan Rebollo por los asesinatos de Diana
Maidanic, de 22 años, Laura Raggio, de 19 años, y Silvia Reyes, también de 19
años, ocurridos el 21 de abril de 1974, en el caso de las denominadas Muchachas
de Abril.
Para la legisladora y exconductora de Subrayado, la condena
a Rebollo “marca un paso fundamental en el largo camino hacia la justicia
por las graves violaciones a los derechos humanos cometidas durante la
dictadura”.
Rodríguez reconoció la sentencia de la jueza Isaura
Tórtora al militar retirado, quien tuvo “más de 50 años de impunidad”,
porque “reconoce el sufrimiento de tres jóvenes mujeres asesinadas por
el aparato represivo del Estado”.
“Con esta condena Uruguay no solo avanza en el
cumplimiento de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos,
avanza en su deber más profundo: garantizar la justicia para todos y todas.
El próximo 21 de abril volveremos como todos los años a reunirnos para
recordarlas”, escribió la senadora frenteamplista.
La sentencia a Roballo surgió tras el pedido del fiscal
especializado en Crímenes de Lesa Humanidad, Ricardo Perciballe, quien
solicitó la condena por “un delito de homicidio complejo, muy especialmente
agravado por la pluralidad”.
Asimismo, para este caso, se solicitó la pena máxima prevista
en el Código Penal “por entenderla adecuada a la naturaleza del delito
cometido y los bienes jurídicos tutelados” y “de acuerdo con los extremos”.
“Las tres fallecidas recibieron múltiples heridas de
proyectiles de arma de fuego dotadas de alta energía y poder destructivo. El
patrón lesional es compatible con haber sido provocado por ráfagas de armas
automáticas o semiautomáticas. […] La hipótesis de que las tres mujeres
fueran abatidas sin un enfrentamiento armado previo es compatible con todos los
elementos que obran en autos. En efecto, la posición de los cadáveres
superpuestos, apretujados entre la pared del fondo y el mueble, con múltiples
heridas de armas de guerra inferidas de frente y desde su derecha permitiría
sostener esa eventualidad”, señala la sentencia, según una publicación de
Madres y Familiares.
Además, la Justicia entendió que está “plenamente acreditado
que el encausado no solo impartió la orden, sino que intervino en el
operativo que ocasionó la muerte de las jóvenes víctimas a consecuencia de los
disparos de arma de fuego efectuados contra ellas”.
Por este mismo crimen, también fueron investigados los
militares fallecidos José Nino Gavazzo y el teniente coronel Eduardo
Klastornik.
En cuanto a la participación de Rebollo, la Justicia señaló
que este era jefe de Artillería n° 1. Esa unidad estuvo a cargo de la detención
y el interrogatorio bajo tortura de integrantes de los movimientos 26 de
Marzo y MLN-Tupamaros, donde obtuvieron la dirección de Washington
Barrios.