Montevideo Portal
La familia de Lorena Muscar, una uruguaya de 42 años que está desaparecida desde hace poco más de un año, se encuentra dividida. Hay quienes creen que Muscar falleció y se convencieron de ello como una forma de justificar su ausencia.
Sin embargo, otra parte de la familia no desestima la información de la Policía, aunque le cuesta creerlo porque “no hay un cuerpo”.
“No velamos a nadie, no cremamos a nadie. Yo no vi a mi hermana muerta. La última vez estaba viva, contenta”, rememora ahora Mónica, hermana de Lorena.
Muscar desapareció el 21 de mayo de 2024. Semanas después, aparecieron algunas de sus pertenencias en la playa del balneario Buenos Aires (Maldonado). Antes de eso, la Policía había establecido que la mujer había ido hasta ese lugar, pero la señal de su celular se perdió al llegar a la arena.
Lorena, que tenía dos hijos —uno de ellos fallecido en su niñez—, atravesó varios períodos de depresión. En ese contexto, tuvo al menos dos intentos de suicidio mediante el consumo de medicamentos.
Mónica contó a Montevideo Portal que, antes de su desaparición, la depresión de su hermana estaba controlada tras consultar con especialistas y comenzar un tratamiento que la estabilizó.
Para la Policía, la corriente del mar habría arrastrado el cuerpo de Muscar, lo que hizo imposible continuar la búsqueda. Aunque las autoridades rastrillaron por cielo, mar y tierra, no lograron obtener pistas precisas sobre dónde podría encontrarse el cadáver. En setiembre de 2024, la búsqueda fue oficialmente dada por terminada.
Mónica asegura que el caso de su hermana sigue siendo un misterio.
“Horas antes de que se fuera al agua, había estado en un cumpleaños. Hacía varios meses que no tenía episodios manifiestos de depresión, y mucho menos intentos de autoeliminación”, agregó.
La situación llevó a su familia a informarse más sobre la depresión, sobre todo para poder acompañarla mejor. Según Mónica, el punto de quiebre fue la muerte de uno de sus hijos.
“Desde ahí ella no pudo recuperarse. Pero la realidad es que, en el último tiempo, había hecho un esfuerzo enorme: logró sobreponerse al duelo y salir a flote, con la ayuda de todos, pero sobre todo gracias a su propio empeño”, finalizó Mónica.
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