Una solicitud de una prueba de ADN podría resolver un caso de desaparición que lleva casi tres décadas en marcha. El análisis revelará si una mujer turca es la niña que desapareció en Italia en 1996, cuando tenía 3 años. El parecido entre la adulta de hoy y la menor desaparecida se descubrió
hace 16 años, pero la pista se estancó entonces.
Según consigna el periódico Daily Mail, Angela Celentano, apodada la Madeleine McCann de Italia (aunque su caso ocurrió antes), desapareció durante un viaje con sus padres y hermanos a Monte Faito, un pueblo de Nápoles.
Más de una década después del caso, la periodista italiana Vinceza Trentinella dijo a la policía que Angela había sido secuestrada y se encontraba retenida en la isla turca de Büyükada, cerca de Estambul. Trentinella afirmó que Angela vivía con un hombre que decía ser veterinario y
que la joven creía que él era su padre.
La reportera afirmó que un supuesto sacerdote identificado como Don Augusto le comunicó la información, quien a su vez dijo haberla escuchado en confesión del supuesto veterinario. La mujer notificó el incidente a la policía, entregándoles una tarjeta de visita del supuesto religioso, quien
tenía una notoria cicatriz en el cuello. También aportó fotos y un breve video
de la joven, que se parecía mucho a Angela.
Sin embargo, las autoridades turcas no progresaron nada. Tras recibir un número de teléfono falso del veterinario, identificado como Fahfi Bey, abandonaron la pista.
Ahora, la jueza italiana Federica Colucci ha reabierto el caso con una nueva investigación para encontrar la supuesta «pista turca» , para que «se resuelva cualquier duda sobre la identidad» de la persona señalada, según informó
el periódico local Corriere Del Mezzogiorno.
Un giro inesperado
Los tribunales italianos han solicitado a la fiscalía que escuche a testigos en Turquía y que identifique a la niña que aparece en el vídeo grabado por Trentinella en 2009. La Fiscalía de Nápoles había solicitado recientemente el archivo del caso, pero los abogados de los padres de la niña
desaparecida insistieron en una prueba de ADN, que ahora se concedió.
Colucci también solicitó una audiencia con un testigo en particular, un farmacéutico de Büyükada, para confirmar la presencia de la cicatriz en el cuello del presunto sacerdote. Las autoridades también quieren obtener una foto de la pareja actual de la mujer que se parece a Angela.
Un abogado de Estambul, inscrito en el Colegio de Abogados de Büyükada, también compartirá los documentos de identificación de la mujer que aparece en el vídeo grabado por la periodista en 2009.
Las supuestas apariciones
Durante casi tres décadas se han realizado varias pruebas de ADN a varias personas que guardaban similitud con Angela. En 2017, una persona parecida a ella fue identificada en México, y unos años después, otras en Sudáfrica y luego en Venezuela.
Los padres de Angela creyeron que una modelo venezolana muy parecida a su hermana mayor podría ser su hija desaparecida. Pero sus esperanzas se vieron frustradas cuando, en febrero de 2022, la prueba de ADN dio negativo.
“Por una amarga casualidad, había un parecido sorprendente con una de las hermanas de Angela”, declaró entonces el abogado de la familia, Luigi Ferrandino. “Creíamos, teníamos esperanza, pero lamentablemente el resultado fue negativo”.
La última pista
Hace años, Trentinella decidió seguir una nueva pista después de que el ya mencionado sacerdote la contactara. “ya no puedo llevar esta carga en mi conciencia”., habrían sido las palabras del religioso.
Tras recibir la información, Trentinella viajó a Büyükada y se reunió con el veterinario Fahfi Bey en una clínica veterinaria. En la ocasión se hizo pasar por una turista que quería adoptar un gatito, y así pudo ver de cerca a la mujer que podría ser la niña secuestrada.

“Sabía adónde ir, qué buscar y los encontré”, declaró Trentinella el año pasado en una entrevista con Daily Mail.
La reportera comentó las dificultades que debió superar cuando descubrió a la mujer y al presunto secuestrador. “No fue fácil. Él estaba muy nervioso, y ella no sabe nada de su vida; cree que el hombre con el que vive es su padre”, refirió.
Trentinella afirmó que el hombre que se hizo pasar por el padre de Angela escribió un número en su tarjeta de visita, afirmando que era suyo. Pero cuando la policía italiana, en colaboración con colegas turcos, llamó al número, contestó un hombre que dijo no conocer a la periodista.
Más tarde se supo que el nombre del hombre era Fahri Dal, lo que indicaba que el verdadero Fahfi Bey había dado un número falso. Y hasta allí llegó el accionar de la policía turca en el caso.
La desaparición
Angela Celentano desapareció mientras jugaba con otros niños de la comunidad evangélica a la que pertenece su familia. Su padre contó que, apenas momentos antes de la desaparición, había hablado con la pequeña y le había prometido llevarla a jugar a otro lugar. Luego se giró para hablar con su
esposa y, en cuestión de segundos, Angela desapareció.
La pareja pasó días en la montaña buscando a su hija, con la ayuda de amigos, los Carabineros, el Ejército, perros rastreadores e incluso helicópteros.
La policía interrogó a todos los presentes en la excursión y descubrió que las últimas personas que vieron a Angela fueron dos niños —Renato, de 11 años, y Luca, de 12— con quienes la niña supuestamente había ido por un sendero.
Pero los relatos no coincidían: los niños cambiaron sus versiones varias veces y luego se retractaron, lo que dio origen a una serie de misterios que rodean el caso hasta el día de hoy. A pesar de varias alertas falsas a lo largo de los años, los padres de Angela afirman que nunca perderán
la esperanza.
“Hasta que tenga la certeza de que mi hija ha muerto, hasta que tenga un cuerpo que lamentar, seguiré buscándola con vida. Aunque tenga que ir hasta el fin del mundo», dijo su progenitor.
Ángela cumplió 30 años en junio de 2023, y sus padres revelaron que todavía celebran su cumpleaños cada año y le compran un regalo, que guardan en el armario. Mantienen viva la esperanza de que algún día se produzca el ansiado reencuentro.
«Han sido 30 años muy difíciles para nosotros. No pasa un solo día sin que pensemos en Ángela, quien siempre ha estado presente en nuestras vidas, aunque no físicamente. Estamos seguros de que tarde o temprano, volveremos a abrazarla», expresó el hombre.
El caso presenta grandes similitudes con el de Madeleine McCann, la niña británica de que desapareció en Portugal 2007. Al igual que Ángela, Madeleine tenía 3 años, estaba de vacaciones con sus padres y su paradero es todavía un misterio.