Los
candidatos a la Casa Blanca, la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald
Trump, traen agendas muy diferentes en sus políticas económicas sobre
fiscalidad y aranceles, aunque ambos coinciden en su interés por reducir la
inflación y evitan formular propuestas concretas para rebajar la abultada deuda
nacional.
Estas son
algunas claves del programa económico que presenta cada candidato:
1. Fiscalización
El expresidente
plantea disminuir el impuesto de sociedades del 21 al 15% para aquellas
empresas que fabriquen sus productos en Estados Unidos. También propone
eliminar los impuestos sobre las prestaciones mensuales de la seguridad social,
pues según la ley actual los beneficiarios de estos servicios deben pagar
impuestos del 50 al 85% de sus prestaciones.
En
contraposición, la vicepresidenta ha manifestado su idea de aumentar el tipo de
impuesto de sociedades del 21 al 28%, mientras que ha prometido no incrementar
los impuestos de los hogares estadounidenses que ganen US$ 400.000 o menos al
año.
La
demócrata también propone incrementar el tipo impositivo sobre las plusvalías a
largo plazo al 28% para los estadounidenses que ganen US$ 1 millón o más y ha
defendido un impuesto mínimo multimillonario para aquellas personas cuyo
patrimonio neto sea mayor a US$ 100 millones.
Uno de
los principales objetivos de los candidatos es combatir la inflación: para
ello, Harris planea prohibir los precios abusivos en el país mientras que Trump
promete reducir los precios de la gasolina, los comestibles y otros artículos.
2. Aranceles
Una de
las propuestas económicas más polémicas de Trump es la de aumentar los
aranceles sobre las importaciones estadounidenses del 10 al 20 %, una cifra que
subiría considerablemente en el caso de los productos de China (60%) y en las
importaciones de empresas de EE. UU. que trasladen su producción a México (200%).
Esto ha
sido criticado por analistas que aseguran que podría incrementar la gruesa
deuda pública de Estados Unidos, y muchos incluso han cuestionado su legalidad,
pues la Constitución del país otorga el poder de imponer aranceles al Congreso,
no al presidente.
Por su
parte, Harris no ha entrado en detalles en esta materia, aunque el gobierno de
Joe Biden ha mantenido en estos cuatro años la mayor parte de aranceles de la
pasada presidencia de Trump.
3. Impulso
a las nuevas empresas y a la clase media
Harris ha
centrado sus discursos económicos en su deseo de impulsar a las nuevas pequeñas
empresas, a las que promete una deducción fiscal de US$ 50.000 (diez veces más
que la rebaja de US$ 5.000 actual).
Además,
la demócrata se ha marcado como objetivo generar 25 millones de nuevas
solicitudes de pequeñas empresas en los dos primeros años de su presidencia.
Por otro
lado, Harris propone dar a las familias un crédito fiscal de US$ 6.000 por cada
hijo recién nacidos durante su primer año de vida y reincorporar otro crédito
fiscal de US$ 3.600 por hijo para las familias de clase media y baja.
Mientras,
Donald Trump plantea limitar temporalmente los tipos de interés de las tarjetas
de crédito a, aproximadamente, el 10%, y eliminar las deducciones de impuestos
de intereses en los préstamos para automóviles con el fin de ayudar a los
norteamericanos de clase media.
4. Vivienda
En la
cuestión de la vivienda, Harris ofrece dar 25.000 a los compradores de una
primera propiedad a la vez que sugiere crear 3 millones de nuevas unidades de
vivienda en los próximos cuatro años.
Mientras,
Trump propone incentivos fiscales para los compradores de vivienda y se
compromete a reducir la inflación y acabar con la inmigración ilegal para así
disminuir los altos costos del mercado inmobiliario.
5. Sanidad
En
materia de sanidad, Kamala Harris quiere ampliar las subvenciones de la Ley de
Asistencia Sanitaria Asequible —conocida como “Obamacare”—, que ayuda a las
personas de bajos y medios ingresos a conseguir cobertura médica.
Harris
propone que el programa de salud para mayores Medicare cubra los gastos de los
cuidadores en el domicilio, así como ampliar el límite de US$ 35 para los
gastos en insulina más allá de los clientes de este plan.
Por su
parte, Trump no ha dado detalles sobre su programa de sanidad (al ser
preguntado por ello en el debate presidencial, dijo tener “un concepto de plan”
que aún no ha desarrollado).
7. La
gran incógnita: la deuda de EE. UU.
Algunos
analistas han criticado los planes económicos de ambos candidatos por su falta
de detalles en cómo Trump y Harris reducirían la deuda pública de EE. UU. (que
en 2023 era de más de US$ 35 billones, lo que supone un 118,73 % del PIB del
país).
Según el
Comité por un Presupuesto Federal Responsable, el plan de Harris incrementaría
la deuda en US$ 3,5 billones durante la próxima década, mientras que el de
Trump la aumentaría en US$ 7,5 billones.
EFE