Aldo Maximiliano Vannucci, un ciudadano argentino oriundo de la provincia de Córdoba de 46 años, fue enviado a prisión en España tras haber sido declarado culpable de varios delitos sexuales contra menores de edad.
Según informó Infobae, el modus operandi del pederasta consistía en interactuar con los niños mediante el videojuego Fortnite y les hacía regalos para engañarlos y formar una “amistad virtual”. Luego de establecido el vínculo, les pedía fotos desnudos para difundirlas mediante redes de pedófilos.
Los hechos comenzaron en 2021. Vannucci contactaba niños de 13 años y les regalaba tokens del Fortnite para luego poder hacer videollamadas vía Skype o por el propio sistema del videojuego y pedirles que le muestren sus partes íntimas o posen sin ropa.
A raíz de que los padres de una de las víctimas detectaron actividades sospechosas de su hijo en la plataforma de videochat, se radicó la denuncia policial y las autoridades comenzaron la investigación. De ella surgió un archivo de 560 gigabytes que fue analizado y del que surgieron las principales pruebas.
Los investigadores concluyeron que en el juego se hacía pasar por informático o por profesor de inglés y que vivía con su madre en la ciudad de Málaga. También descubrieron que había abusado sexualmente de un adolescente de 16, hijo de una amiga.
Vannucci ya había sido condenado a 50 años de prisión por otros 22 delitos de abuso sexual y dos de exhibicionismo, por los que pasó más de una década en la cárcel y fue expulsado del país ibérico, aunque pudo regresar por su doble nacionalidad.
Ahora, la Justicia de Madrid lo sentenció a 433 años de penitenciaría por una decena de delitos de abuso sexual a menores de edad, 18 de embaucamiento o ‘sexting’, siete de elaboración de pornografía infantil y 13 de ciberacoso.
A pesar de esta condena de más de cuatro siglos, podrá recuperar su libertad dentro de 20 años —cuando tenga 66 años de edad— porque ese es el plazo máximo que establece el Código Penal español para que una persona esté recluida. Una vez fuera de la cárcel, no podrá volver a entrar a España por diez años.