El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, confirmó que será candidato en las elecciones de octubre de 2026, en busca de un cuarto mandato. La declaración se produjo durante una rueda de prensa junto a su par indonesio, Prabowo Subianto, en Yakarta, en el marco de una gira oficial por el Sudeste Asiático.
“Voy a cumplir 80 años, pero pueden estar seguros de que tengo la misma energía que cuando tenía 30. Y voy a disputar un cuarto mandato en Brasil”, expresó Lula ante los medios, oficializando lo que hasta ahora eran solo insinuaciones dentro del Partido de los Trabajadores (PT).
El mandatario sostuvo que, pese a que su gestión actual concluye a fines de 2026, “está preparado para disputar otras elecciones”, en un momento en que su popularidad se mantiene firme y la oposición aún no logra consolidar una figura competitiva.
La confirmación supone un nuevo capítulo para el líder progresista, que ya gobernó entre 2003 y 2010, y regresó al poder en 2023, tras derrotar a Jair Bolsonaro en unos comicios marcados por la polarización política. Si volviera a imponerse en 2026, sería el primer presidente brasileño en ocupar el cargo cuatro veces.
Lula, que cumplirá 80 años el 27 de octubre, insistió en que conserva el vigor político de sus inicios. Su figura sigue siendo central dentro del PT, el movimiento que fundó en 1980 junto a sindicalistas e intelectuales de izquierda.
Su trayectoria política incluye derrotas en tres elecciones presidenciales previas, además de la prisión que cumplió en 2018 por corrupción, sentencia luego anulada por la Corte Suprema, lo que le permitió volver a competir.
Mientras tanto, el bolsonarismo busca redefinir su futuro político tras la condena a 27 años de prisión contra el expresidente. La derecha carece de un liderazgo claro, y aunque se mencionan nombres como Tarcísio de Freitas, Romeu Zema y Ratinho Jr., ninguno logra aún aglutinar al electorado opositor.
Los sondeos preliminares, según medios brasileños, proyectan a Lula como favorito frente a cualquier figura de la derecha o el centro, lo que podría facilitar su continuidad en el Palacio de Planalto.
Brasil volverá a las urnas el 4 de octubre de 2026, en un escenario en el que Lula buscará consolidar su legado histórico y su influencia dentro de la región, mientras la oposición intenta recomponerse tras la caída de su principal referente.
Con información de EFE.