El ministro
del Interior de Perú, Víctor Torres, renunció este lunes al cargo tras haber
sido cuestionado en las últimas horas por la participación de agentes de la
Policía Nacional en el allanamiento de la casa de la presidenta Dina Boluarte.
“A mí no me
ha botado ni me han censurado (en el Parlamento), yo me voy tranquilo”, declaró
Torres al abandonar el Palacio de Gobierno tras la sesión de este lunes del
Consejo de Ministros.
El ministro
aseguró que tomó esta decisión porque tiene “un problema familiar” y no por la
presión de sectores políticos y sociales, que incluso llevaron a congresistas
opositores a plantear que sea censurado en el cargo.
Torres
agregó que deja el gabinete de ministros “en paz, con las manos limpias” porque
ha “trabajado poniendo un grano de arena por el Perú”.
También
invocó a todos los sectores del país a que «dejen trabajar a la
presidenta» y aseguró que las investigaciones que se han abierto contra la
mandataria «son elementos distractores».
“Promuevan
que el Perú siga gobernándose tranquilo con la señora Dina (Boluarte)”, afirmó
dirigiéndose a los periodistas.
Pidió,
además, dejar “que trabaje tranquilo” el coronel Harvey Colchado, el jefe de la
Dirección de Delitos de Alta Complejidad (Diviac) de la Policía Nacional del
Perú (PNP) que dirigió la operación que a la medianoche del pasado viernes
allanó la casa de Boluarte rompiendo la cerradura de la puerta de ingreso.
Medios
locales insistieron en las últimas horas en que Torres había pedido al
comandante general de la PNP, Víctor Zanabria, que destituya a Colchado, aunque
el jefe policial negó esa posibilidad.
“Sobre el
particular, no tenemos ningún pedido, no hay pedido de nadie, nadie puede pedir
un cambio, sería tráfico de influencias; el único pedido que hay es el de la
fiscal para que trabaje en el Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción
del Poder”, declaró Zanabria al respecto.
Este lunes
también se informó que Boluarte desautorizó un recurso de habeas corpus que
había presentado un abogado para anular las órdenes del allanamiento que se
realizó durante la madrugada de este sábado en su vivienda y en el Palacio de
Gobierno de Lima, como parte de la investigación de sus relojes de lujo no
declarados.
La
gobernante también solicitó este domingo a la Fiscalía de la Nación que se
adelante la fecha en que debe brindar su declaración sobre el llamado ‘caso
Rolex’, que ha sido programada inicialmente para el próximo viernes.
El abogado
de la mandataria, Mateo Castañeda, agregó que el pedido se ha hecho “en vista
de la turbulencia política que se viene produciendo como consecuencia de las
diferentes diligencias”, realizadas por la Fiscalía y la Policía por este caso.
Boluarte
estaba citada para mostrar sus relojes en el Ministerio Público el pasado
martes y para dar su testimonio el pasado miércoles, pero había pedido
reprogramar ambas citas debido a su “cargada agenda”, por lo que no acudió a
ninguna de ellas.
Esto provocó
el allanamiento de su vivienda, donde el operativo policial rompió la cerradura
de la puerta, y del Palacio de Gobierno, tras lo cual la presidenta afirmó que
el procedimiento se había hecho de manera arbitraria, abusiva y
desproporcionada, y que ella estaba colaborando con la investigación.
En
respuesta, el Ministerio Público aseguró que el operativo se realizó “por orden
del Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria de la Corte Suprema” y que en
el operativo “no se ubicó ni se produjo la entrega de los relojes Rolex por la
presidenta de la República, pese a que se le requirió”, pero sí obtuvo otros
elementos de interés para la investigación.
EFE