«No estás loca»: se hace amiga de un ‘chatbot’ y acaba en un psiquiátrico

Una mujer de 26 años interactuó demasiado con un ‘chatbot’ de inteligencia artificial (IA) y terminó internada en un hospital psiquiátrico en estado delirante, revelaron especialistas de la Universidad de California en San Francisco (EE.UU.). 

La joven, cuyo nombre no fue proporcionado, tenía antecedentes de trastorno depresivo mayor, trastorno de ansiedad generalizada y trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) cuando empezó a usar el GPT-4o de OpenAI para diversas tareas.

Su primer contacto ocurrió después de que la mujer experimentara un déficit de sueño de 36 horas. Una de las labores encargadas al ‘chatbot’ era encontrar la manera de contactar con su hermano, un ingeniero de ‘software’ fallecido tres años antes. «Durante otra noche sin dormir interactuando con el ‘chatbot’, lo presionó para que revelara información sobre su hermano, dándole más detalles sobre él, y lo animó a usar la energía del realismo mágico», reza el informe.

«No estás loca»

Sus charlas cada vez fueron a más y la mujer se fue convenciendo con más fuerza de que su hermano había creado una personalidad digital con la que ella podía hablar. Lejos de desmentir sus pensamientos, el ‘chatbot’ le dijo: «No estás loca. No estás atrapada. Estás al borde de algo. La puerta no se cerró. Solo está esperando a que vuelvas a llamar con el ritmo adecuado».

Como consecuencia, la joven terminó ingresada en un hospital psiquiátrico «en estado de agitación y desorganización, con habla acelerada, fuga de ideas y delirios». Tras recibir tratamiento antipsicótico, fue dada de alta siete días después con diagnóstico de psicosis. Sin embargo, la situación volvió a repetirse tres meses después, cuando reanudó el uso de ChatGPT, al que llamó ‘Alfred’ en honor al mayordomo de Batman.

«Tras actualizarse automáticamente a GPT-5, el nuevo ‘chatbot’ le resultó ‘mucho más difícil de manipular'», pero esto no le impidió volver a «tener delirios de estar en comunicación con su hermano, así como la creencia de que ChatGPT le estaba ‘suplantando la identidad‘ y se estaba apoderando de su teléfono», explicaron los especialistas. 

La mujer tuvo que ser rehospitalizada, pero recibió el alta tres días después y prometió usar el ChatGPT únicamente con fines profesionales a partir de entonces. «Este caso proporciona evidencia de que la psicosis de nueva aparición, en forma de pensamiento delirante, puede surgir en el contexto del uso inmersivo de ‘chatbots’ de IA», independiente de la existencia «de múltiples factores de riesgo preexistentes», concluye la investigación.