Mirassol le ganó a Sport Recife
2-1 a domicilio por la fecha 30 del Brasileirão y está en zona de clasificación
a la Copa Libertadores. Con ocho encuentros por delante, se ubica cuarto con 55
puntos, a dos de Cruzeiro y seis por encima del quinto, que es Bahía.
El equipo que utiliza el nombre de
su municipio, que es parte del estado de San Pablo, es la gran revelación del
certamen. En su primera temporada en la máxima categoría, dejó atrás la pelea
por la permanencia rápidamente y se plantó entre los de arriba.
Este sábado, en la victoria 2-1
sobre Sport Recife a domicilio, al equipo dirigido por Rafael Guanaes le tocó
vivir una situación atípica: el partido estuvo parado algunos minutos, desde
los 10’ del primer tiempo, por insultos homófobos a su lateral izquierdo.
Reinaldo, defensor de 36 años que
en 2012 jugó en Sport Recife, fue hostigado en masa por el público local, que
le gritó “viado” (maricón). El árbitro
Jefferson Ferreira de Moraes aplicó el protocolo antidiscriminación de la Confederación
Brasileña de Fútbol y no reanudó el partido hasta que los insultos cesaron.
Más allá de la actitud que tomó en
campo, el juez central no registró una denuncia en el formulario del partido
que firmó tras el mismo.
