El partido de Javier Milei, La Libertad Avanza
(LLA), se impuso en los comicios legislativos de este domingo en la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires con el 30% de lo votos y prácticamente duplicó los
apoyos recibidos por la lista del expresidente Mauricio Macri, Propuesta
Republicana (Pro), tras contabilizarse el 90% de los votos.
En una elección marcada por la baja
participación (53%), la lista encabezada por el portavoz presidencial, Manuel
Adorni, obtuvo, según los primeros resultados, un 30% de los votos, seguido por
la lista liderada por el peronista Leandro Santoro, Es Ahora Buenos Aires, que
obtuvo un 27,5%, y por Pro, encabezada por Silvia Lospennato y que alcanzó
cerca de un 16%.
Cuarta se ubicó la lista liderada por el
exalcalde de la ciudad y otrora referente de Pro, Horacio Rodríguez Larreta,
que se hizo con el 8% de los votos.
Estos resultados marcan una clara y sorpresiva
victoria para el oficialismo, que veía esta elección como una disputa clave en
sus aspiraciones de desplazar a Pro como mayor fuerza conservadora de la ciudad
y principal oposición al peronismo.
Los apoyos obtenidos por LLA aumentaron en más
de un 100% con respecto a los que había registrado en las últimas elecciones en
la capital argentina, en 2023, cuando sumó en torno a un 13% de los votos.
Por su parte, Pro registró una fuerte caída,
tras haber cosechado en los últimos comicios en torno a un 50% de los votos, en
el que, al menos hasta ahora, era su principal bastión electoral.
Los resultados difundidos hasta el momento
representan así un fuerte golpe por parte del partido de Milei al de Macri,
fuerzas que sostuvieron una alianza a nivel nacional en 2023 y a nivel
parlamentario en 2024 y que optaron por presentarse por separado a estos
comicios.
El 27,5% de los votos obtenido por Santoro se
acerca a los que indicaban los últimos sondeos previos a los comicios, que lo
daban como ganador previendo un peor desempeño electoral de Adorni, el gran
ganador de la jornada.
Si bien estos comicios, en los que se pusieron
en juego 30 de los 60 escaños de la Legislatura porteña, no tienen un peso
importante a nivel institucional, sí lo tienen a nivel simbólico, resultaban
una prueba de fuego en la disputa por la hegemonía de la derecha argentina en
la antesala de las elecciones legislativas nacionales de octubre.
La Ciudad de Buenos Aires, que desde 1996 tiene
un Gobierno autónomo como el de las provincias, es el cuarto distrito electoral
del país y es considerada un termómetro político fundamental.
EFE