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Noticias Nacionales

¿Por qué el gobierno tiene secuestrada la ley de teatro?

todaymayo 11, 2024

Fondo


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¿Cómo se encuentra el teatro El Galpón luego de la crisis que padecieron en 2020?

Yo creo que lo que nos pasa a nosotros no escapa a la realidad en todo el ámbito cultural. No hay un solo rubro cultural que se haya recuperado en esta etapa de postpandemia. Si bien el flujo de público se ha normalizado en casi todos los eventos, las secuelas son lo importante y de eso tenemos que hablar. Cuando tú tienes un centro cultural como esté, cerrado durante un año y medio, tenés que seguir con el mantenimiento, y tenés que mantener la plantilla de trabajadores aunque tengas la posibilidad de enviarlos al seguro de paro.

Esta es una de las cosas que también ha hecho esta institución históricamente. Tratamos de siempre preservar las fuentes laborales.

Tenemos un elenco de 40 integrantes. Y como lo he manifestado en varias oportunidades, nosotros en el medio artístico, directa e indirectamente, le damos trabajo durante el año a más de 150 personas. Porque no sólo son los artistas y los técnicos. No nos olvidemos que también hay productores y empresas que están vinculadas al hecho artístico.

También es importante resaltar que los 40 integrantes del elenco de El Galpón no están profesionalizados. Su trabajo es profesional y de altísimo nivel y excelencia, pero cuando digo que no están profesionalizados es que no están remunerados, que no hay un solo compañero, actor o actriz, que pueda vivir de la profesión.Tiene que salir a laburar ocho horas o a trabajar en dos lugares distintos, para después recién venir, en la noche, y ensayar el espectáculo que se va a estrenar, o el espectáculo que está en cartel.

Esa realidad nos identifica en el mundo, porque los elencos profesionales de otros países no pueden creer cómo un elenco de excelencia como el que tiene El Galpón, hace posible de que estas puertas estén abiertas. Entonces, no: de la post pandemia no nos hemos levantado.

Pero hay otra razón por la que no nos hemos levantado: todos los convenios que nosotros teníamos con cinco o seis entes del Estado -y no estoy hablando de subvenciones- cayeron todos, incluso antes de la pandemia. Eso nos obligó a tener prácticamente un 90 % de los empleados en seguro de pago.

¿No hubo ningún acuerdo para renovar estos convenios?

No, esto es muy simple. Es según los jugadores que estén en la cancha, con esto quiero decir que cambian los gobiernos y cambian las políticas culturales.

El MEC no se abrió al diálogo

En el contexto político de la pandemia, El Galpón ha tenido enfrentamientos con el ministro de Educación y Cultura, Pablo Da Silveira…

Tuvimos esos enfrentamientos y los mantenemos en el presente, porque un Ministerio de Educación y Cultura que prácticamente va a cumplir cinco años, que no tenga la amabilidad o la delicadeza, simplemente por una cuestión de diplomacia, de tener un diálogo no con institución teatral El Galpón, sino no tener un diálogo con el espectro del teatro independiente, es grave.

El ministro no ha tenido un diálogo con los artistas, ni con las instituciones teatrales independientes. Se puede tener diferencias políticas y en las líneas culturales, pero no se puede negar que el hecho teatral y que su ámbito no es de importancia sólo para un sector de la población, es de importancia para toda la población.

Nosotros hacemos el esfuerzo de mantener las puertas abiertas porque atendemos por año a más de cien mil estudiantes que son de primaria y secundaria, que quizá sea la primera oportunidad que han tenido en su vida de poder acercarse al hecho teatral.

Esta visita que hacen acá, implica una coordinación con todo el equipo docente y con los programas vigentes de primaria y secundaria, e implica una coordinación con hechos de importancia e inquietudes sociales que el niño o el adolescente estén viviendo en este momento, de las cuales nosotros si escuchamos de que hay una problemática determinada -como bullying o suicidio- El Galpón realiza espectáculos que cuestionan y dan insumos para que los docentes puedan trabajar sobre esa problemática.

Estamos cubriendo una labor que no se cubre ni a nivel público ni privado. Para nosotros eso es un buque insignia. Este proyecto lo trajeron nuestros compañeros cuando volvieron del exilio después de aquella gran persecución de la dictadura militar, después de habernos intervenido el edificio y haberlo despojado de punta a punta, todo lo que teníamos acá lo tuvimos que reconstruir de cero.

Aporte a la sociedad y la discusión política

¿Piensan realizar alguna obra o expresión vinculada al presente período electoral?

Nosotros tratamos de siempre hacer arte en primer lugar. Con eso se pueden decir muchas cosas. El Galpón tiene un sello identificable: se caracteriza por decir cosas, que le importen y que aporten a la sociedad. Por eso cuando hablamos de, por ejemplo, el bullying, le estamos dando un mensaje al espectro político de que se ocupe mucho más de ese tipo de heridas que se le generan a un adolescente o a un niño.

No solo tratamos de que el mensaje sea social, es muy importante el mensaje político y que en el mismo se sientan identificadas todas las banderas políticas. Creo que el hecho teatral tiene que hacer pensar y reflexionar a la gente.

¿La clase política entiende lo que está queriendo decir el galpón?

Es una pregunta difícil… pero diría que sí y no. Nosotros no tenemos ningún problema con nadie del espectro político, a pesar de que desde afuera piensen que vamos políticamente hacia un lado solo. Eso es una gran equivocación, porque lo peor que vos podes hacer con cualquier institución teatral es encasillarla políticamente, y que esto nuble lo cultural.

Nosotros hablamos con diputados y senadores de Cabildo Abierto y no tenemos ni uno solo que no nos diga “no, tienen razón”, “lo que reivindican es justo”. Hablamos también con legisladores del Partido Colorado, porque hemos recorrido todo el espectro político, no vamos a golpearle la puerta solamente a un senador o diputado del Frente Amplio.

A todos les hemos transmitido por qué es importante el teatro, y todos ellos consideran que estamos en lo justo, no que estamos equivocados.

Es tan así que nuestro presidente de la República fue uno de los senadores que levantó la mano para votar la Ley de Teatro, porque la Ley de Teatro, y hay que saberlo, está votada por unanimidad por las dos cámaras.

¿Y tú cómo puedes entender que nuestro presidente, que levanta la mano apoyando la Ley de Teatro, no le dé un solo peso, no inyecte absolutamente nada en el presupuesto de esta ley, que esta esté secuestrada como lo está hoy por hoy en un cajón del Ministerio de Educación y Cultura?

Porque después de aprobada en septiembre de 2019, pasados cuatro años, le pedimos a los señores diputados y senadores que mandaran una minuta al Poder Ejecutivo preguntándole a nuestro presidente dónde estaba la ley, por qué a la ley no se le dotaba del presupuesto necesario y por qué la tienen desactivada totalmente cuando había sido votada por unanimidad prácticamente a dos meses del receso parlamentario y a tres meses de que se cambiara el gobierno. Se le dio un tiempo hasta el 30 de abril del 2023 para que el presidente contestara.

El presidente lo que hizo fue mandar todos esos documentos al Ministerio de Educación y Cultura, y hasta el día de hoy no salieron del cajón en el que están.

Si estoy diciendo que todo el espectro político ha votado una ley de teatro independiente por unanimidad, y cuando tú vas a hablar con cualquiera de esos actores políticos, te dicen que tenemos razón, que no puede ser que las cosas estén como están, que no puede ser que esa ley no tenga un solo peso. Pues al día de hoy la ley todavía está en el limbo del Ministerio de Educación y Cultura.

Entonces, yo diría que acá estamos hablando de una irresponsabilidad y quizá de un doble discurso, porque yo me siento y te digo una cosa, pero cuando me voy hago otra.

Somos uno de los pocos países de dentro del contexto latinoamericano que no tiene legalizada normativamente una ley de teatro.





Fuente

Escrito por hiperactivafm


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