Provincia argentina de Misiones al borde del estallido social; crecen las protestas

«Hay más de 10.000 personas contando mal«, calibró el suboficial retirado al dar cuenta de la adhesión a las manifestaciones que se realizan en el centro de la capital provincial.

Unos 200 agentes de las Fuerzas federales de Seguridad llegaron el domingo hasta el lugar de amotinamiento, entre ellos personal de Gendarmería, Prefectura y la Policía Federal, después de que los manifestantes rechazaran un aumento salarial del 15%.

Tras algunas escaramuzas, los agentes federales dialogaron con la Policía local y se retiraron de la zona.

Los agentes habían sido autorizados a realizar el desalojo de la dependencia policial por el titular del Juzgado de Instrucción N°6, el juez Ricardo Balor, a raíz de una denuncia impulsada por el Ministerio del Gobierno local, que acusó a los policías amotinados de sedición, hurto de patrulleros, daños e interrupción de las comunicaciones.

Protestas desde el viernes

Las protestas comenzaron en la madrugada del viernes, cuando agentes policiales retirados tomaron el Comando Radioeléctrico para visibilizar sus reclamos salariales y después se sumaron otros colegas en activo junto a familiares del interior.

Una resolución publicada ese mismo día en el Boletín Oficial conformó un comité de crisis que presiden la ministra nacional de Seguridad, Patricia Bullrich, y el gobernador de Misiones, y que integran además los jefes de las cuatro fuerzas federales y el Servicio Penitenciario Federal.

Entre tanto, la protesta continúa frente al Comando Radioeléctrico, con el corte de las dos avenidas en cuya intersección se encuentra la sede policial.

(Sputnik)