Montevideo Portal
La Armada Nacional inició una investigación administrativa en 2022 con el fin de aclarar qué fue lo que ocurrió con 35 toneladas de carne que habían sido compradas y no se sabía nada sobre ellas. A pedido de la división de Jurídica, se le solicitó colaboración al departamento contable de la fuerza.
La contadora a cargo de revisar la documentación, Gisel Aguirre, elevó un informe con sus conclusiones el 30 de marzo de 2023 y los resultados de su trabajo fueron divulgados este martes por el periodista Leonardo Haberkorn en Telemundo (Canal 12).
La primera conclusión relevante fue que la cantidad de carne que quedaba pendiente de entrega era casi el doble de la denunciada inicialmente.
Aguirre halló que en la licitación 28/2021 y su ampliación surge que aún no se entregaron 27.006 kilos de bondiola por un valor de $ 3.999.423. Hay una segunda licitación (28/2022 y su ampliación) que tiene un saldo pendiente de entrega de 30.392 kilos, cuyo valor es de $4.406.267. Ambos pedidos sumados dan un total de 57.398 kilos de carne pendiente de entrega por un valor de $ 8.405.690.
Además, el análisis contable llegó a la conclusión de que la empresa encargada de la venta de los productos cobró un precio más caro del que estaba fijado en la licitación. “Esto resultó en la entrega de menos kilos de carne que los adjudicados de acuerdo al monto facturado y pagado a la empresa”, señaló la contadora.
Por último, también se concluyó de que los almirantes encargados de hacer las compras realizaban “conversiones”; es decir, compraban otros cortes como lomo, colita de cuadril, asado y chorizo haciéndolo descontar como bondiola, que era el corte licitado.
Las adquisiciones de cortes más caros se daban con los valores que fijaba el frigorífico y el análisis contable detectó sobreprecios en estos casos. Por ejemplo, en setiembre de 2022 se pagó el chorizo a un precio de $725 el kilo.
“Los precios de los cortes que se entregaban a cambio de la bondiola eran impuestos por la empresa y se pueden considerar en algunos casos muy por encima de los valores del mercado”, señala el informe.
El departamento jurídico de la Armada resolvió, a partir de estos datos, someter a un sumario por faltas muy graves a Raúl Nieto, capitán de fragata y jefe de suministros, y a Fernando Varietti, capitán de navío y subjefe del Servicio de Aprovisionamiento. El primero ya pasó a retiro y el segundo lo está tramitando.
Hay una denuncia presentada en Fiscalía, pero el caso no tiene demasiada celeridad, y se les impuso un Tribunal de Ética, que terminó hace dos meses y no se sabe qué fue lo que ocurrió.
Montevideo Portal