Un hombre de 73 años quiere que su exmujer le deje ocupar la
mitad de su apartamento o le entregue el 50% del valor del inmueble en una
posible venta.
«Quiero mi mitad», dijo recientemente el ciudadano
chino Liu Yusheng en declaraciones al periódico South China Morning Post. El
hombre abandonó a su esposa e hija en Shanghái hace 33 años para iniciar una
nueva vida en Estados Unidos.
Yusheng se mudó a EE. UU. junto a su hermano, pero la realidad fue
bastante diferente al “sueño americano” que buscaba. No consiguió empleo y carecía
de lugar de residencia.
El hombre, que espera el perdón de su familia, asegura que
no se contactó porque le robaron el pasaporte y el dinero que tenía.
La situación cambió el año pasado, cuando una entidad
filantrópica de shanghaineses residentes en Estados Unidos recaudó fondos para
pagarle un pasaje de vuelta a China y cubrir sus gastos de traslado.
Sin embargo, si Yusheng creía que su familia lo acogería con
los brazos abiertos, se equivocó por completo. De acuerdo con el citado medio,
el yerno del septuagenario lo describió como un «anciano
desagradable» y descartó la posibilidad de una reunión con la familia.
“Has estado fuera de casa durante muchos años. Siempre
ignoraste a tu familia. Por lo tanto, nuestra familia también te tratará como
si no existieras. No nos reuniremos contigo», afirmó
Yusheng contó que cuando dejó su país natal origen en 1990,
la empresa estatal para la que trabajaba le alquiló un apartamento, donde se
quedaron su esposa y su hija.
Tiempo después, la residencia fue demolida, por lo que las
autoridades indemnizaron a sus familiares con un apartamento más grande,
ubicado en el centro de Shanghái, en el que aún hoy viven.
Como la expareja se niega a darle a Liu la mitad de la
propiedad, el hombre, que desde su regreso a China vive en un refugio, ahora
amenaza con demandarla. Hasta el momento, la mujer no se ha pronunciado
públicamente sobre el caso.
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