El equipo de salud del Hospital Garrahan, el centro pediátrico de referencia en Argentina, reclama por el impacto que implican los cambios al reglamento del sistema de residencias médicas, dispuesto por el Ministerio de Salud Pública del país vecino.
Los médicos convocaron este lunes una conferencia de prensa para señalar que la medida del gobierno de Javier Milei “precariza las condiciones laborales de los residentes y debilita la formación pediátrica, afectando directamente la calidad del sistema público de salud”.
En diálogo con Montevideo Portal, el jefe del servicio de oncología del hospital, Pedro Zubizarreta, opinó que estos cambios van “en la línea” proclamada por el presidente Milei de “destrucción” del Estado. “Es parte de todos los mecanismos de destrucción. Si fuera por [Federico] Sturzenegger, que es el ministro que está a cargo de desmantelar el Estado, le pondría llave al hospital y se acabó. No le importa nada”, señaló.
“Lo que decidieron es hacer un ofrecimiento de cambio de contrato [a los residentes]. En lugar de ser un contrato laboral bajo la ley de contrato de trabajo, pasan a ser becas, que es un estipendio, una contraprestación de una capacitación en servicio, pero que no tiene ningún derecho laboral establecido claramente. Tiene, además, el tema de que facilita un control mayor. O sea, no se pueden quejar de nada, están mucho más condicionados por lo que las autoridades dispongan. Esto es el cambio”, explicó.
Así, de acuerdo con Zubizarreta, esto puede generar que “haya un menor ingreso de residentes en estos hospitales” como el Garrahan, y que opten por otros centros de salud.
Consultado sobre si veía posibilidades de negociación con las autoridades, Zubizarreta respondió: “A la luz de cómo se maneja con todas las otras reparticiones, uno te diría que no. Mucha esperanza no podés tener. Ahora, nosotros tenemos el sello de nuestro hospital que es muy difícil de atacar a nivel de la opinión pública. Para ellos es un problema porque no le encuentran cómo entrarle bien, ¿Entendés? Poner a la sociedad en contra del Garrahan es inviable, pero bueno, ellos entienden ese lenguaje nada más, así que no sé cómo termina. Ahora, nosotros seguimos en la lucha; perdida la tendríamos si la abandonamos”, dijo.
El médico señaló también que la posición del equipo de salud del Hospital Garrahan parte de la base de que “la salud pública está siendo atacada”.
“Nosotros somos un lugar emblemático por ahí, importante, que obviamente tiene un presupuesto importante y es llamativo. Pero la defensa nuestra se cabalga sobre la defensa de la totalidad de la salud pública entendiendo una medicina universal de calidad e igualitaria, para todo el mundo, y esa es la bandera a la que no que no queremos renunciar. La medicina no es una mercancía, que es la visión del gobierno. O sea, el gobierno quiere privatizar todo. Es un país con un modelo para unos pocos. Estamos en contra de eso”, zanjó.