Juliana Marins, la brasileña de 26 años que el pasado sábado cayó por la ladera de un volcán en Indonesia, fue encontrada muerta.
En este cuarto día de búsqueda, el equipo de rescate instaló un campamento avanzado cerca de donde se encontraba la mujer, en un parque nacional agreste y a gran distancia de cualquier centro poblado.
Los socorristas ignoraban la condición de la mujer. Una primera filmación obtenida con un dron la mostraba sentada sobre el suelo rocoso, viva y moviéndose, aunque parecía incapaz de ponerse en pie.
BRASILEIRA CAIU EM UM VULCÃO E NÃO FOI RESGATADA
Juliana Marins, uma brasileira de 26 anos de Niterói (RJ), caiu 300 metros num vulcão chamado Rinjani, na Indonésia, no sábado (21) enquanto fazia uma trilha sozinha. Ela foi vista por um drone, mas o resgate ainda não conseguiu… pic.twitter.com/JlN0F0Eu7Q
— Jornal Expresso (@JornalExpresso4) June 23, 2025
Sin embargo, luego resbaló más abajo del lugar de la caída inicial, y el lunes un dron la localizó mediante sensores de temperatura. En esa segunda ocasión, Juliana ya no se movía.
A diferencia de lo sucedido en los intentos del domingo y el lunes, esta vez los socorristas lograron llegar hasta el lugar donde se encontraba la joven, pero la encontraron muerta.
Su familia compartió la información hace minutos a través de Instagram.
“Hoy, el equipo de rescate logró llegar al lugar donde se encontraba Juliana Marins. Con gran pesar, les informamos que no sobrevivió. Seguimos muy agradecidos por todas las oraciones, los mensajes de cariño y el apoyo que hemos recibido”,
escribieron.
El padre de la joven recibió la noticia mientras se encontraba en vuelo a Indonesia.
El Rinjani es un volcán activo y el segundo más alto de Indonesia, que atrae numerosos turistas internacionales cada año. No ha entrado en erupción desde 2016.
En los últimos años, el Monte Rinjani ha sido escenario de graves accidentes relacionados con turistas que siguen senderos no oficiales o ignoran el equipo de seguridad. Entre las víctimas se encuentran un portugués que se cayó mientras se tomaba una selfi en 2022,
una suiza que escalaba sola en 2024 y un malayo que se cayó de una cuerda en
2025.