Un estudio llevado adelante por tres investigadores concluyó que una tortuga hallada muerta en Punta del Este fue probablemente atacada por un tiburón tigre.
La información consta en el informe “Tortugas marinas y tiburones en Uruguay. Consideraciones sobre un caso de carroñeo o ataque a Caretta caretta”, publicado por los licenciados Carlos Prigioni, Pablo Núñez y Álvaro Sappa.
Según consigna la emisora fernandina FM Gente, el tratado aborda el caso de una tortuga que apareció muerta el pasado 14 de marzo en la parada 11 de playa Brava, a la altura del Hotel San Rafael.
En el escrito, los autores revisan antecedentes de tortugas marinas atacadas por tiburones y se detienen en las particularidades del caso puntaesteño en particular.
Además, se recoge la opinión experta de Hugo Bornatowski, doctor en Zoología e integrante del Centro de Estudios Marinos de Curitiba. Junto a un equipo de profesionales, Bornatowski analizó a lo largo de varios años 655 tortugas marinas que vararon en la costa noreste de Brasil, y estudió a
las que presentaban mordeduras de tiburón.
En el caso de la tortuga hallada en marzo, el experto analizó la información disponible y consideró que la lesión que presentaba era consistente con la mordedura de un tiburón tigre.
“Los registros gráficos evidencian una mordida semicircular que involucró prácticamente el cuarto posterior derecho del carapacho”, detalla el informe.
El animal no fue conservado, por lo que no se pudo realizar un análisis forense que permita evaluaciones más precisas de qué especies de tiburón depredan y carroñean tortugas marinas, consigna el trabajo.
Asimismo, el texto recuerda que la tortuga caretta caretta, conocida comúnmente como cabezona o boba, es mordida por tiburones con mayor frecuencia que otras especies.
Hasta el momento, los científicos no encuentran una explicación al hecho de que esta especie no haya desarrollado mecanismos para mejorar la capacidad de escape y reducir el riesgo de depredación, como sí lo hicieron otras tortugas.
En cuanto al tiburón tigre (Galeocerdo cuvier), se trata de una especie de amplia distribución geográfica, y que puede superar los cinco metros de longitud. Voraz depredador nocturno, ataca todo tipo de animales, desde peces a tortugas, y hasta aves que se posan en el agua.
Existen registros de ataques de tiburón tigre a humanos. Sin embargo, como sucede con las demás especies de escualos, estos incidentes son poco frecuentes.